Y como esto no es una crítica, empezaré por hacer lo que no haría un crítico, que es decir si la película me gustó o no. Y tengo que decir que psssseee más bien tirando a no. Igual es la decepción causada por las expectativas, no lo niego. Pero si en una cinta de 100 minutos acabas pidiendo la hora, la cosa no parece ir bien. Aprovecho para decir, por otra parte, que 100 minutos me parece la duración ideal para una película, y que todo lo que sobrepase ese margen, o es una obra maestra o necesita un recorte.
A mí que esta pose apuntarse a la sien con el dedo me recuerda a algo...
A priori la historia tenía interés, payasos, violencia, estética kitsch (me encanta usar esta palabra, me hace sentir más listo) setentera, y un tipo como Carlos Areces cuya sola presencia en la pantalla me resulta hilarante, yo soy un tío simple. Y tengo que reconocer que la cinta comienza muy bien, pero tarda demasiado poco en caerse y hundirse en la dispersión.
No todo es un desastre, insisto en que el principio, y hasta el cambio de ritmo (no voy a entrar en detalles para quienes no la han visto), es muy interesante. Y también es de remarcar la capacidad para crear imágenes impactantes, la cinta es visualmente muy buena. Pero la historia está mal resuelta y acaba desdibujando una idea y unos personajes que podían haber dado mucho más.
Canciones:
Muse: “Uprising”
Gorillaz: “Clint Eastwood”
Curtis Mayfield: “Right for the darkness”