Bale dispararía la inversión en galácticos de Florentino

Florentino Pérez ha negociado con los directores deportivos más duros del continente en las dos etapas en las que ha estado presidiendo el Real Madrid. Figuras como Massimo Moratti, Sir Alex Ferguson, Jean-Michel Aulas o Adriano Galliani han terminado cediendo ante el poderío económico del club blanco, que esta temporada ha encontrado el hueso más duro de roer en el presidente del Tottenham, Daniel Levy.

Levy no tiene intención de que su estrella, Gareth Bale, abandone el Tottenham, y las cifras a las que se están llegando durante esta pretemporada empiezan a ser de auténtico vértigo. La cifra de 98,4 millones de euros que apuntaba la BBC recientemente parece que va a ser superada de forma inminente, y las posturas no parecen estar llegando a ningún acuerdo.
El precio de Bale podría irse por encima de los 100 millones de euros, lo que supondría un traspaso récord no sólo en el Real Madrid, sino en el mundo del fútbol. Florentino Pérez puso el tope en la temporada 2009/10, la de su retorno a la presidencia, con la contratación de Cristiano Ronaldo por 94 millones de euros, a las que hay que sumar las de Kaká y Karim Benzema, que llegaron en la misma temporada y supusieron 100 millones de euros adicionales.
La política de 'Zidanes y Pavones' de la primera era de Florentino Pérez, a principios del siglo XXI, dejó un fichaje de relumbrón por temporada, lo que llegó a convertirse en una tradición. Con mayor o menor rendimiento, y con mayor o menor desembolso económico, por el Bernabéu han pasado jugadores como Luis Figo -quien inició la saga 'galáctica'-, Ronaldo Nazario, David Beckham, Michael Owen o Robinho.
El último en llegar al Bernabéu, Luka Modric, salió por 30 millones de euros, y tras unas duras negociaciones precisamente con Daniel Levy, quien ahora está intentando resistirse nuevamente a Florentino Pérez para evitar volver a perder a su jugador franquicia. El croata ha cuajado una temporada discreta en su primer año en el Real Madrid, y la relación con la afición no pasa de la indiferencia, al no haberse convertido en titular indiscutible para José Mourinho.
En total, esta sucesión de jugadores mediáticos -entre los que no se ha incluido a jugadores cuyos fichajes han supuesto también unos desembolsos notables como Xabi Alonso, Ángel di María o Asier Illarramendi-, han supuesto un gasto total de 476 millones de euros. Si las cifras que han aparecido en los últimos días por Bale se convierten en realidad, la inversión superaría los 600 millones de euros.