Balneario de Mondariz
El placer de un turismo de sensaciones, compartiendo experiencias con personajes como Emilia Pardo Bazán, Arniches, Isaac Peral, John Rockefeller III o Galdós que han disfrutado del verano de esta villa termal gallega que se considera un referente europeo del Salutem per Aqua y del termalismo mineromedicinal.
Balneario de Mondariz, relajarse y disfrutar en un espacio que guarda, entre sus paredes, la historia de tres siglos. El placer de un turismo de sensaciones, compartiendo experiencias con personajes como Emilia Pardo Bazán, Arniches, Isaac Peral, John Rockefeller III o Galdós que han disfrutado del verano de esta villa termal gallega que se considera un referente europeo del Salutem per Aqua y del termalismo. Balneario de Mondariz nace en 1873, año en el que sus aguas fueron declaradas de Utilidad Pública por el Gobierno español, reconociendo sus propiedades mineromedicinales.
Una villa termal que dio origen al municipio más pequeño del país y que continúa hoy en activo gracias a la recuperación de su actividad y de sus edificios por parte de un grupo de empresarios liderados por el coruñés Javier Solano Rodríguez-Losada, labor reconocida por los premios Mejor Balneario de España 2005 y 2006 y Mejor Alojamiento de Galicia 2007, además del Premio Conde Nast Traveler que lo destacó en 2012 como Mejor Spa de España.
`Esto no es un Balneario es el palacio de las aguas, ni en España ni en el extranjero hay nada superior…´ Así describía el Nobel de literatura D. José de Echegaray la grandeza y suntuosidad del Balneario de Mondariz.
La primera casa de baños fue construida en 1880 y a partir de ahí el Gran Hotel que, en 1900, rivalizó con los grandes balnearios de Baden-Baden, en Alemania, y Bath, en Londres. Unos edificios de servicios, y un sanatorio, ahora readaptado como centro de congresos, convirtieron el lugar en `La Compostela del enfermo´, según la denominaba Rodríguez Castelao. Un lugar de peregrinación para personas con diabetes, problemas de piel, anemia o piedras en el riñón que acudían a buscar soluciones al interior gallego bajo la prescripción de galenos nacionales e internacionales.
El nivel de los termalistas que acudían cada verano a Mondariz, llegó a convertir el Gran Hotel en un centro social, político y cultural del que dieron cuenta Emilia Pardo Bazán, José Echegaray o Galdós en sus escritos. Fiestas amenizadas por el cuarteto Bacarat, llegado cada año expresamente de París; reuniones políticas entre las que destaca la celebrada, en agosto de 1929, por el jefe del Gobierno español, Miguel Primo de Rivera, y el primer ministro de Portugal, Arthur Ivens Feraz a los que se unió posteriormente el jovencísimo John Rockefeller III, heredero de la mayor fortuna de los Estados Unidos; así como eventos culturales como el acto de entrada de Rey Soto y Ramón Rodríguez Castelao en la Real Academia Galega. Una actividad que todavía hoy se mantiene con la visita de personalidades de diferentes sectores que llegan a Mondariz a disfrutar de un lugar de leyenda.
Toda una época de esplendor que ha dado paso a un centro moderno con un balneario a la carta, un circuito termal basado en la tradición Celta y el Palacio del Agua, un spa de 3.000 metros cuadrados de piscina interactiva. Una gestión propia que desarrolla varias líneas de negocio: hostelería, golf, termal, y cosmética natural.