B&B (“Beers and Burgers”) ¡Vaya secreto!

Recientemente tuve la ocasión de disfrutar de una nueva vivencia gastronómica de la mano de los chicos de TGB (The Good Burger) y el resultado no pudo ser más positivo.  Para ello nos citaron en el nuevo local que acaban de abrir en la Calle San Bernardo 105. Hay que decir que el termino ‘hamburguesería’ se queda a años luz de lo que nos vamos a encontrar al atravesar su puerta.

Allí nos espera un espectacular local de 600 metros cuadrados, dividido en varias alturas y que nace con un propósito, que la gente no acuda a él única y exclusivamente a comer hamburguesas y sí a disfrutar de experiencias en buena compañía.  Esta flagship store es un espacio que viene dispuesto a regalarnos muchas sorpresas. Inspirado en los locales más chulos y de moda de Nueva York, éste TGB, que te cautiva en cuanto lo pisas, fue el escenario idóneo para hacer una divertida cata de maridaje entre cervezas y hamburguesas ¿se puede ser más feliz?

Es verdad que en España no estamos acostumbrados a consumir estos productos de manera conjunta pero en este evento nos explicaron y enseñaron que esto no tiene porqué ser así. Tenemos el concepto de que este plato sólo se puede acompañar de refrescos pero, para mostrarnos que este cliché no es del todo correcto, allí nos congregaron a unos cuantos amigos.

Después de dejarnos boquiabiertos con el local comenzó el desfile de hamburguesas. Tuvimos la ocasión de degustar cuatro de las ocho especialidades  y la verdad es que todas estaban deliciosas. Desde la ‘clásica’ TGB Burger, pasando por la innovadora Pull Pork BBQ,  hasta la sorprendente y jugosa Pollo BLT. La última en entrar en escena fue la hamburguesa ECO Burger, la joya de la corona, con carne de vacuno ecológica. Previo a cada degustación nos explicaron y especificaron los ingredientes de cada una. Sólo así se entiende el enorme trabajo de creación que hay detrás de cada producto. Todos los ingredientes están estudiados y mimados a conciencia para que su conjunto, en boca, tenga un sabor fabuloso.

Al paso de cada hamburguesa se nos ofrecían varias jarras de cerveza, cada una con matices y sabores distintos (rubia, de trigo, negra, etc…). En algunos casos los sabores se complementaban y en otro precisamente se contraponían, lo que hacía su combinación incluso más efectiva. (He de reconocer que de las cuatro tandas  que nos sirvieron sólo acerté la cerveza que mejor combinaba en una pero bueno, la intención es lo que cuenta).

En definitiva,  este rato entre colegas, risas y buena comida fue sólo un pequeño aperitivo de lo que este impresionante local ha venido a hacer en Madrid. Atrevido, innovador y con las ideas claras, este TGB a mí ya me ha cautivado.

En su página web podéis encontrar más información sobre sus productos y promociones

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