Banderas: esos rectángulos de tela que decoran fachadas de hotel y casetas de fiestas de pueblo. También tapan ataúdes. En s. XXI, inútiles.— Juan Pina (@JuanPina) October 5, 2013El cual dio lugar a un pequeño debate entre el propio Juan Pina, Luis Serrano y yo mismo. y que quien esté interesado puede verlo yendo al propio tuit.
Este tema es complejo por todo lo que implica, así que voy a desgranarlo poco a poco.
1.- Físicamente una bandera es cierto que no es más que un trozo de tela con unos dibujos y colores concretos. Igual que un libro no es más que láminas de celulosa con manchas de tinta.
2.- Sin embargo, una bandera igual que un libro tienen un valor por la interpretación que se les da, es decir, una persona que vea un ejemplar de El Quijote, sabe que no es mero papel, una persona que vea una bandera con tres bandas horizontales, rojigualdas sabe que no es un mero trozo de tela. Pero, si yo veo un libro en chino mandarín o una bandera que no conozco para mí no significa absolutamente nada.
3.- Desde el surgimiento del Estado-Nación modernos las banderas se las han apropiado los Estados, eso es cierto, ahora bien, de la misma manera los Estados se han apropiado de todas las instituciones que han podido como el dinero, el derecho, el lenguaje, etc y eso no las deslegitima, más bien, lo que hay que hacer es desestatalizarlas. Con lo cual las banderas nacionales tienen legitimidad en tanto en cuanto son voluntariamente aceptadas por los individuos de la propia nación.
Una vez dejado claro estos puntos, ¿qué ocurre con la quema de banderas? Pues, bien a partir la teoría de la propiedad y el principio de no agresión podemos inferir que si tú compras un bandera y la quemas es tu propiedad y no hay ningún problema, lo cual es cierto. Solo habría que tener cuidado de que al quemar la bandera no quemases algo que no fuera tuyo.
Ahora bien, sinceramente aunque si yo veo a alguien quemando una bandera de España y me siento ofendido es algo totalmente subjetivo, pero es curioso comprobar que la persona que intenta mostrar su rechazo a una nación que no existe como ocurre en el caso de los nacionalistas catalanes, lo que hacen es quemar dicha bandera. ¿No están de este modo dando carta de naturaleza? Según el refrán no hay mayor desprecio que no hacer aprecio, de modo que quemar o destruir símbolos de una nación no es más que asumir que dichos símbolos tienen significado.
Resumiendo, las banderas o símbolos libremente aceptados son legítimos y ante todo hay que tener respeto mutuo ante los distintos símbolos de las naciones, ya que son proyectos voluntarios entre individuos que no tienen que entrar en conflicto, los que crean y generan esos conflictos son los Estados que a día de hoy usurpan dichas naciones.