Revista Viajes
Enclavada al noroeste de la provincia de Jaén, lindando con Castilla la Mancha, Baños de la Encina está declarada Conjunto histórico artístico desde 1.969 encontrándose al amparo de dos Parques Naturales: Sierra de Andújar y Despeñaperros y muy cerca del pantano del río Rumblar.
Breve introducción histórica.
Son las pinturas rupestres, encontradas al norte de su término municipal, las primeras huellas del hombre encontradas en la localidad allá por el Neolítico.
Es la minería la que ha formado, de forma especial, la organización social de la localidad así como la de El Centenillo, pedanía de Baños de la Encina. Sus ricos yacimientos de cobre y bronce y la explotación en el Imperio Romano de sus minas de plata dieron lustre a la localidad. Con el declive de la minería, ya en la Edad Media, se intensifica la explotación agrícola y es así como, en 1.225, Fernando III de Castilla toma posesión de la ciudad convirtiéndose, por su estratégica posición entre la Meseta y Andalucía, en una importante vía de comunicación.
En el siglo XV, enfrentamientos políticos entre la nobleza feudal y el Estado Moderno merman la influencia de la localidad. Tendrá que llegar el siglo XVIII, para que Baños de la Encina y su entorno intensifiquen, de nuevo, la agricultura y la ganadería hasta que, a finales del Siglo de Oro, la creación de otras localidades como Guarromán, Carnoneros, La Carolina y Santa Elena esquilmen su territorio acabando definitivamente con el Bien del Común.
Conjunto Histórico artístico.
Sin duda el eje central del mismo lo configura el Castillo de Burgalimar o de Bury Al-Hammam. Construido en el año 968 por Al Hakan II, hijo del rey Abd Al Rahmán III, es una impresionante fortaleza musulmana en un estado de conservación, tanto externo como interno, realmente envidiable y una de las mejores de Europa. Está declarado Monumento Naciconal Histórico-Artístico, desde 1.931 y, con el castillo de Florencia, en Nápoles, son los dos únicos de Europa que tienen en el honor de ondear, en su Torre del Homenaje, la bandera azul coronada de estrellas del Consejo de Europa.
El castillo se yergue como la mejor atalaya para asomarse a su barrio medieval: piedra, cal, barro y mucha sencillez apretados por la muralla de los Corvera, del siglo XV, hoy convertida en hospedería.
La ermita de Jesús del Llano.Si bien en torno al castillo nacieron sus primeras casas, consecuencia de la necesidad de culto, se creó la parroquia con su cabecera hacia Tierra Santa. La ermita es de estilo barroco y de rococó su fastuoso camarín. Accedemos a él por la sacristía y su camarín es de planta cuadrada. En su espacio inferior figuran iconografías de San Juan, San Marcos, San Mateo y San Lucas y, en una de las esquinas, una virgen de la Inmaculada. Todo el espacio queda cubierto por una cúpula de anillo polilobulado y decorado por un entretejido de tallos y hojas salpicado de espejos geométricos.
La puerta de madera de nogal, del siglo XVIII, que cierra el camarín está moldeada ricamente en casetones poligonales que recuerdan a la lacería mudéjar. El camarín guarda el culto del Cristo del Llano.
La iglesia de San Mateo. De cuerpo principal, estilo gótico, la torre tiene acabados renacentistas siendo así que se realizó una ampliación a mediados del siglo XVIII, a partir del crucero, de la portada principal. Su interior alberga un grandioso retablo mayor, obra de Francisco Palma Burgos. Destacan también el púlpito, el coro y la pila bautismal aunque su elemento más importante es el Sagrario, una de las joyas del arte sacro de la provincia de Jaén, que data del siglo XVII.
Construido en madera de ébano, marfil, plata y concha de carey y compuesto por una cúpula barroca enmarcado por cuatro columnas de concha con capiteles y basamento de plata.
Otros monumentos.
El Molino del Santo Cristo, enclavado en la parte alta del pueblo y construido en sillares de arenisca de la zona, alberga una exposición permanente denominada "Historias al viento". Tiene 12 metros de altura en tres niveles y 4,5 m. de diámetro.
Al sur de la plaza del mismo nombre se encuentra el Ayuntamiento. El edificio, del siglo XVI, sobresale por su aspecto sobrio y sencillo al igual que su rejería. Completa el entorno de la plaza, la Casa de los Salido, de 1.756, construida en sillería roja de Sierra Morena; así como el Palacio de Priores, de la misma fecha y tambien realizado en sillería de la zona.
Pero las calles de la localidad, consecuencia de la prosperidad de antaño, está inundada de muchas más casas-palacio habitadas por entonces por la nobleza. El Palacio de los Molina de la Cerda (1.724); la Casa de los Delgado de Castilla, la Casa de los Escalantes, la Casa de los Pérez Caballero, el Palacio de los Jiménez de Mármol, etc..., sin olvidar dónde se presta culto a la patrona local, la Virgen de la Encina, en la ermita del mismo nombre. De tamaño descomunal, levantada en el siglo XVII sobre un gran torreón bajomedieval.
Información Turística.
Como si de una gran ciudad se tratara, Baños de la Encina cuenta con una oficina propia de información turística. Abierta de martes a domingo, así como todos los días festivos, organiza las visitas de los viajeros en un número superior a dos personas, tanto a los lugares ya reseñados como a otros como el Torreón del Recuerdo, el Museo del Territorio, el Aula de la Miel o diferentes actividades relacionadas con la naturaleza. Dispone de una propia guía turística que, desde este enlace, podréis consultar y descargar.
Para los amantes del senderismo y la naturaleza, recordar que Baños de la Encina se encuentra enclavada dentro del Parque Natural de la Sierra de Andújar. Es por ello que es lugar ideal de partida de numerosas excursiones por sus diferentes rutas. No me extiendo en ellas, os dejo aquí el enlace que se muestra en la estupenda página web de la localidad.
Comer y dormir ¿será ello posible ?No os podéis perder de degustar, siempre en abundancia, cualquier plato relacionado con la caza o los vinculados al mundo pastoril, como las migas o los calandros con liebre. El venado a la bañusca es, sencillamente, exquisito así como la ensalada de perdiz. Qué dónde. No me atreveré yo a recomendar uno más que otro pues, tanto en el Palacete María Rosa como en el Palacio Guzmanes, al igual que en el resto de establecimientos la comida es de calidad.
Y si de dormir se trata alojamientos de tipo rural como en la propia localidad se encuentran a vuestra disposición para disfrutar de unas merecidas vacaciones.
Ahh, se me olvidaba. Que no sabéis llegar. Autovía de Andalucía, Km. 288, provincia de Jaén. Un desvio de tan solo 6 Km. y hallaréis la localidad que dista 52 Km de la capital y se encuentra a 420 metros de altitud sobre el nivel del mar. Que lo disfruten, ciudadanos viajeros.
Enlaces de interés:http://www.bdelaencina.com