Al parecer los mensajes neutrales y aparentemente pacifistas del afamado autor de grafittis ha originado un gran descontento en la victimista sociedad palestina.
Así tanto imágenes como la de un soldado israelí y un terrorista palestino en una lucha de almohadas y mensajes como el que contiene una placa colocada en la entrada del museo del hotel-museo donde les dice a sus huéspedes que no “escojan lados” en el conflicto o, al describir la barrera de separación, una declaración dice: “El muro es una mentira. Se vende la idea de que hay una simple división entre la gente de aquí, pero no la hay ” no son lo suficientemente victimistas ni criminalizan lo deseado a la única democracia de Oriente Medio
Fuente: Maan News