Revista Cultura y Ocio
"Era indudable que estaba muerta: Émeline ya presentaba los primeros síntomas de rigidez cadavérica. A menos que fuera la congelación. Debo admitir que nunca la había visto tan hermosa. Quitarle el camisón no planteó problemas. Debido a su rigidez, me costó ponerle la ropa de color que había confeccionada para ella."