Revista Salud y Bienestar
Con todo lo que ha costado llegar a la Ley 42/2010 para prohibir fumar en los espacios de uso público, para evitar que un no fumador tenga que respirar de forma obligatoria el humo del tabaco... y de repente la comunidad de Madrid se plantea autorizar el consumo de tabaco en el casino Eurovegas.La evidencia es clara y tal vez sea conveniente conocer si las medidas de freno del tabaquismo funcionan desde el punto de vista político. La conocida revista Plos One nos ofrece dos referencias casi obligadas:- El artículo "Impact of a Partial Smoke-Free Legislation on Myocardial Infarction Incidence, Mortality and Case-Fatality in a Population-Based Registry: The REGICOR Study" está basado en un estudio español que se dedica a analizar el efecto de la legislación antitabaco del año 2006 en la incidencia y mortalidad del infarto agudo de miocardio (IAM). La conclusión es clara: reducción de la incidencia y mortalidad de IAM, principalmente en mujeres, personas entre 65 y 74 años y fumadores pasivos. Es decir, la legislación que limita el consumo de tabaco funciona bien en términos de salud.- Otro gran artículo se centra en California y en su programa antitabaco: "The Effect of the California Tobacco Control Program on Smoking Prevalence, Cigarette Consumption, and Healthcare Costs: 1989–2008". En este caso, se analizan los planes legislativos con las campañas para reducir el consumo y los resultados se expresan desde una perspectiva económica: reducir en un punto porcentual el número de fumadores se asocia con una reducción de 35'4 dólares de gasto sanitario per capita. Quebrar la unidad estatal en relación al consumo de tabaco implica abrir la caja de los truenos y volver a la situación de hace unos cuantos años, cuando todos los lugares públicos de ocio olían (apestaban) a tabaco. Y si una comunidad empieza a ceder, puede que alguna más se apunte...