¡Buenas a todos!
Es viernes ¡yupi! Y más feliz te hace cuando ves tus vacaciones confirmadas para la semana que viene. De hecho, mi chillido será la próxima semana de jueves, porque viernes ya estaré cogiendo el coche camino de Irún, mi primera parada. Pero para eso aun quedan unos días de trabajo y también mucho que leer y que contar.
Como por ejemplo, la lectura simultanea que hacemos en Twitter de la novela Memento mori, y que estamos disfrutando mucho. Es una novela de lo mas adictiva, que empieza muy fuerte y mantienen muy bien el ritmo, al menos donde yo estoy que es aproximadamente por la mitad.
Os dejo como siempre sus primeras líneas:
El vaho no le permite ver con nitidez a través de la bolsa a pesar de ser transparente. El calor y la humedad se manifiestan en forma de sudor que nace en la frente y discurre por la cara en varios afluentes para terminar desembocando en el calcetín que tiene metido en la boca, hasta la campanilla. Hace ya tiempo que a Mercedes no le queda fuerza física ni psíquica como para pensar en que va a poder liberarse de la silla de madera en la que está sentada.
Como os comentaba, el inicio es bastante duro y yo, que empecé a leerlo mientras comía, me quede alucinada. La novela es larga, así que aun me quedan unas 300 páginas porque esta semana no he tenido tiempo casi para leer, pero seguramente este fin de semana sea para mi sola y le dé un buen empujón, para luego volver a mis lecturas terroríficas. Porque aún queda mucho mes temático del terror por delante…
Así que contadme ¿Qué libro os acompañará este fin de semana?