Beatriz Talegón: “Ahí comenzó el declive de las ideas, básicas en una formación que se llama política y progresista”

El PSOE ha vuelto de la noche a la mañana a todos los diarios nacionales, ocupando en muchos casos la portada de las mismas. ¿La razón? Medios de comunicación, ciudadanía…etc están testando si el nuevo PSOE de Pedro Sánchez puede aportar realmente lo que promete con claros tintes de regeneración o asistimos nuevamente a la cara ilusionante que se queda en fiasco.

Bien es cierto que un par de actuaciones de partido pueden darnos a entender que se está eligiendo otro camino (generalización del proceso de primarias y publicación de cuentas), pero recordemos que seguramente cada uno de nosotros ya haya tenido esta sensación antes. Todavía no es hora de cantar victoria.

Esta semana tenemos el placer de contar en Polikracia con Beatriz Talegón, una persona que conoce muy bien el partido desde dentro. Con ella repasaremos los derroteros en los que se mueve actualmente su partido, pasando por Sánchez, el PSOE y sus posibles alianzas y el Parlamento europeo. A disfrutar.

-¿Qué le parece la elección de Pedro Sánchez cómo nuevo secretario general de los socialistas españoles?

No se puede negar que el nombramiento de Pedro Sánchez como Secretario General del PSOE ha supuesto un cambio radical de imagen. Es evidente que nada tiene que ver con el estilo de Rubalcaba. Sin embargo, vivimos en los tiempos de la cultura del envase –como dice Eduardo Galeano-, “el contrato de matrimonio importa más que el amor, el funeral más que el muerto, la ropa más que el cuerpo…” y me preocupa que haya sido solamente eso, un cambio de imagen que pueda carecer de contenido.

Un partido político es una herramienta muy necesaria para el colectivo ciudadano. Supone un motor de pensamiento, de reivindicación y lucha. No es un anuncio ni una campaña de marketing. De momento soy escéptica, pues aunque la imagen pueda resultar un buen reclamo, el PSOE necesita pensar, tomar fuerza y actuar sin dudar defendiendo sus principios.

Y sobre todo, no creo que los proyectos dependan de una persona. Un líder debe inspirar y generar ilusión, energía. Pero no defiendo los liderazgos unipersonales, sino el trabajo de equipo con un proyecto sólido. Habrá que ver si Pedro Sánchez consigue generar esa ilusión y la lucha en torno a un proyecto.

-En su opinión, ¿Por dónde pasa la recuperación del PSOE? ¿Qué medidas debe llevar a cabo el partido para recuperar su status en el panorama política español?

Es fundamental que el PSOE reflexione, para lo que el partido debe generar en su seno debates basados en argumentos sólidos y con contenido. No en titulares interesados. El PSOE tuvo el respaldo de la ciudadanía cuando fue valiente, innovador y sobre todo, coherente.

Para ello es necesaria la formación, una escuela política que se ocupe y se preocupe de formar a la militancia. Tener valores y principios socialistas puede ser algo que se “mame” en casa o a que surja a lo largo de experiencias vitales. Pero sin duda es necesario fijar conceptos y hacer pensar. Cuando otros “piensan” por ti, y toman decisiones en tu nombre, lejos de crear una masa crítica y que pueda ejercer presión, se conforma un grupo de seguidores sin criterio que agachan la cabeza frente a lo que diga el líder. Y ahí es donde se ha llegado después de mucho tiempo. Hoy algunos celebran el cuarenta aniversario del Congreso de Suresnes, donde se acabó con la ideología y la forma de un partido de masas. Para otros, sin embargo, entre los que me encuentro, no hay nada que celebrar, sino más bien lamentar. Ahí comenzó el declive de las ideas, básicas en una formación que se llama política y progresista.

-¿Debe apostar el nuevo PSOE por un giro drástico a la izquierda o adaptarse a la socialdemocracia europea?

El problema es que en su momento dio un giro drástico hacia lo que se llama “socialdemocracia europea”, que en realidad supuso una estrategia para descafeinar a los partidos socialistas europeos durante la guerra fría. Hizo que las organizaciones se desnudasen de valores contundentes, de hojas de ruta y se convirtieran en asociaciones pragmáticas al servicio de los intereses del capital. Intentar matizar un sistema, asumiéndolo como irremediable.

Sin duda hoy es evidente que falta una alternativa contundente a los dictados neoliberales. Y después de haberse acomodado al capitalismo, los partidos que deberían haberse mantenido firmes en sus reivindicaciones ahora están anulados y sin fuerza para dar la batalla.

Sin duda el PSOE debería recuperar su esencia. Y esto es tan cierto como que, de lo contrario, como siga por el camino que va, está condenado a no convencer a nadie. Por eso pierde militantes y votantes de una forma desoladora.

-Pacto: ¿ve posible un acuerdo entre PSOE y uno o más partidos (IU, Podemos, Equo, Ganemos…) para formar un frente de izquierdas?

Llevo tiempo proponiéndolo. No es que me parezca posible, es que lo considero de necesaria urgencia. Es lamentable observar la lucha por el poder, la competencia absurda cuando lo que está en juego es el bienestar (en muchos casos la supervivencia) de la ciudadanía. Asumir la política como servicio público conlleva posicionarse y cooperar. La competencia es cosa de los mercados, no de la política. Y haber trasladado este virus a la participación ciudadana, ha corrompido todo el sistema.

Sin lugar a dudas estoy convencida de que ahora hay que poner fin a las políticas antipersonas que están desarrollando los gobiernos neoliberales y conservadores. El único modo es observar la pluralidad que se da en la sociedad y que conlleva generar un frente común en base a objetivos asumidos por todos los progresistas y grupos de izquierdas.

En este sentido condeno la prepotencia de la mayoría cuando se ponen a repartir carnets de izquierdas, eliminando posibilidades de diálogo con grupos que representan el sentir de mucha gente. En el ADN de la izquierda está la unión y la lucha desde un mismo frente. Quien quiera pensar que tiene la exclusividad de la verdad está cometiendo un error garrafal, y sinceramente, no estamos ya para más meteduras de pata. Cuestan vidas.

-En los últimos días de manera consecutiva se han producido dos polémicas emanadas de comentarios de Pedro Sánchez: funeral de estado para las víctimas de violencia machista y la eliminación (o eso entendió mucha gente) del Ministerio de defensa. ¿Qué opinión le merece todo esto?

Cuando se pretende ser el centro de atención a toda costa, uno se expone a meter la pata. Y sin lugar a dudas alguien como Pedro Sánchez, con la responsabilidad que conlleva hablar en nombre de un partido como el PSOE, debe ser consciente de los titulares que da, aunque no quiera. Yo misma he vivido la frustración de ver cómo se han utilizado mis palabras contra mis propias ideas. Y alguien que cuenta con profesionales y dice tener ambición para gobernar este país ha de ser lo suficientemente hábil como para controlar lo que dice y lo que se interpretará de sus palabras.

A parte de la gestión en la comunicación, si vamos al fondo de lo que se dijo, me parece un desatino la propuesta de los Funerales de Estado para las víctimas de maltrato de género. Es dar por hecho que seguirá habiéndolas, y dar por asumido que no seremos capaces de acabar con esta lacra. Una vez más demuestra que se pone más energía en la imagen que se quiere dar, en lugar de atacar el problema en su raíz. Sin duda considero que las víctimas de violencia de género necesitan muchos más medios, sentirse seguras, respaldadas por las instituciones. En vida, cuando su problema aún se puede y se debe solucionar. Hablar de medidas que las visualiza ya muertas me parece obsceno. Y en cualquier caso, si se quiere hablar del problema desde esta perspectiva lo que hace falta en ese momento es apoyar a las víctimas que van quedando por el camino: los familiares. Con el dinero que se supone gastaría el gobierno en esos Funerales de Estado bien se podría ayudar a los hijos de las víctimas o a las personas a su cargo. Apoyo psicológico y acompañamiento institucional en el día a día. Los padres de las víctimas, los hijos, hermanos, amigos, no quieren que el gobierno les acompañe en el llanto frente a un féretro. Lo que quieren es no llegar a ese punto, y si se llega, tienen otras necesidades mucho más vitales.

Respecto a la reducción del presupuesto para el ministerio de Defensa creo que Sánchez ha desaprovechado una magnífica oportunidad para plantear una cuestión muy interesante. Abrir el debate sobre las inversiones en armamento y en defensa –que no se han visto afectadas por los recortes- sería un buen ejercicio para concienciar a la población en una cultura de paz. Pero una vez más, como decía antes, buscar un titular explosivo hace que todo el argumento se pierda, y con él, la oportunidad de abrir un debate enriquecedor.

-En las últimas semanas saltó a la palestra de la actualidad política la no participación de las Juventudes socialistas de España en los procesos de primarias que van a sucederse en las agrupaciones socialistas de todo el territorio. ¿Qué le parece?

Una tomadura de pelo. Resulta que mis compañeros y compañeras de juventudes eran útiles para votar al Secretario General del Partido. Pero para votar en el ámbito local, no. Esto demuestra que hay quien ha sido capaz de remover cielo y tierra para posicionarse y una vez conseguido, ir cerrando puertas. Es un asunto que debe hacer pensar mucho: en primer lugar hay que estudiar si es lícito que una organización independiente como es Juventudes Socialistas pueda participar en procesos del partido. Existiendo la doble militancia, no sé si es justo que tengan los mismos derechos quienes se comprometen con el partido que quienes se mantienen al margen. Hay que ser coherentes: si Juventudes se quiere mantener independiente, en tal caso, no debería querer participar en procesos internos del partido. Es evidente que cuando ha sido así se ha propiciado que determinados compañeros y compañeras lo hayan utilizado para apoyar a determinados candidatos que, más tarde o más temprano, les han agradecido los favores prestados. Y para eso, mejor no participar.

Siempre he creído que Juventudes Socialistas debería ser el lugar de aprendizaje y de una lucha mucho más libre y abierta, puesto que es una organización que no concurre a las elecciones, lo que le aleja del poder institucional y debería generar posicionamientos valientes. Incluso contra el propio partido. Históricamente así fue. Pero cuando comenzaron a ser una herramienta que movía votos y avales, se han ido pervirtiendo.

No quiero decir con esto que me parezca bien que las Juventudes Socialistas se hayan quedado fuera después de haber estado dentro. Repito que me parece una tomadura de pelo por parte de la dirección actual del partido y una batalla perdida –a veces si no se pelea una batalla, directamente se pierde- por parte del Secretario General de las Juventudes Socialistas, quien además, es diputado regional por el propio partido. Entiendo que no se puede ser juez y parte, y al final, termina la balanza por equilibrase hacia la realidad directa.

Es un debate que debería plantearse en la organización. Con honestidad y sin intenciones ocultas personales. Creo que si se piensa en el beneficio de la organización como colectivo debe hacerse respetar con contundencia sea cual sea su papel, dentro o fuera del partido.

-Marcha atrás de la proposición de ley para el aborto. ¿Ha salido vencedora de esta batalla la izquierda o todavía quedan cosas por conseguir sobre el aborto?

El aborto es una cuestión muy seria que se ha utilizado para contentar a la iglesia católica. Como sociedad hemos avanzado mucho en este sentido. Pero desgraciadamente todavía parece que las mujeres necesitamos tutela y que nos controlen, pues parece que no somos lo suficientemente responsables a la hora de tomar decisiones. Ni más ni menos que un hombre, el exministro de Justicia se sentía legitimado para decidir sobre lo que una mujer puede o no puede hacer con su vida. Alguien que jamás se verá en la triste tesitura de tomar tal decisión. Y para más “inri” le aconsejaban y le susurraban al oído los curas, sí, los que jamás en su vida tendrán la responsabilidad de encargarse de una familia.

Es un disparate que las mujeres sigamos bajo los dictados de un sistema patriarcal que nos ve como ciudadanas inferiores en criterio y capacidad de decisión. El aborto es un síntoma que muestra el fracaso de una sociedad que no ha sabido educar ni prestar los medios suficientes para que tal situación no llegase. Por eso hace falta educación, libre acceso a métodos anticonceptivos. Justamente lo contrario a lo que la derecha propugna. Rezando no se evitan los embarazos, oiga. Se evitan conociendo y entendiendo la sexualidad como una dimensión más del desarrollo de las personas, y siendo practicada con responsabilidad es algo muy placentero que no tendría por qué darnos disgustos. ¿O no?

-Miguel Arias Cañete y su posible conflicto de intereses como comisario de energía de la Unión europea. ¿Qué opinión le merece y cómo debe actuar el PSE/S&D ante esta situación?

El grupo de socialistas y socialdemócratas europeos ya ha jugado su carta. Muchos de los compañeros del parlamento europeo han decidido apoyar a Cañete, en contra de lo que los diputados españoles propusieron. Esto demuestra que la delegación española en el Parlamento Europeo es débil. Y sin duda, creo que es el resultado de habernos opuesto (y con mucho atino) a apoyar a Juncker en su momento, contrariamente a lo que desde la delegación alemana se solicitaba. Está claro que en Europa el peso político recae en Alemania. Y allí el SPD ha abrazado a los conservadores para tener algo de poder. Sin entrar en lo que me parecen estas alianzas –no todo vale para llegar al poder- es evidente que están teniendo consecuencias. Y la primera que podemos ver es ésta: la fuerza de los alemanes se hace evidente cuando nos pasan por encima, a pesar de haberles informado por activa y por pasiva de que Cañete es un nefasto político. Todo el mundo lo sabía, pero aun así han preferido contentar a los conservadores en lugar de dar la batalla junto a los españoles. Una vez más vemos cómo la socialdemocracia entendida como política posibilista hace que se comentan estos errores imperdonables. Eso sí, felicito a la delegación española por haberse mantenido firme. De no haberlo hecho habría supuesto una gran metedura de pata.

-¿Cuál es el futuro de Beatriz Talegón dentro del PSOE y la izquierda española a corto plazo?

La izquierda siempre podrá contar con mi compromiso, con mi energía, mi voz y mis ganas. Eso es lo único que puedo asegurarle. La bola de cristal de momento no me funciona como para saber con más concreción mi función específica. Pero sin duda que daré lo mejor de mí para alcanzar los objetivos que considero necesarios para la ciudadanía.