A veces cuando un hijo está a punto de llegar, nos surgen todo tipo de miedos y preocupaciones, incluso una de ellas puede ser que tu mascota agreda al bebé o que pueda contagiarle alguna enfermedad. Pero no nos equivoquemos, si a nuestros perros o gatos les tratamos del mismo modo, con el mismo cariño y en su ambiente, y con la higiene adecuada (bañándolos y manteniéndolos libres de parásitos) pueden convertirse en los mejores amigos de nuestros pequeños, ser sus compañeros de juegos y protegerles si fuera necesario. Además que nuestros hijos convivan con animales, aprendan a entenderlos, cuidarlos y compartir espacio y tiempo con ellos, es muy beneficioso, les hará personas más libres, abiertas y sociables.
Fular tejido. Lenny Lamb.
Por tanto, cuando estés a punto de traer una vida al mundo o ya lo hayas hecho, piensa en tu mascota, en lo mucho que te quiere y todo lo que daría por ti, él no te abandonaría pasara lo que pasara. Los miedos que nos creamos muchas veces provocan comportamientos no deseados, pero si actuamos con naturalidad, involucrando y compartiendo con nuestras mascotas la increíble experiencia que supone ser madre/padre, ¡podemos lograr que esta sea incluso mucho mejor!¿Tenéis mascotas en casa?
¿Qué tal la convivencia con vuestros hijos?
¿Creéis que su relación es beneficiosa?