- ¿Es la Moncloa? Qué se ponga Zapatero.
- ¿De parte de quién?
- De Mariano.
- Le paso.
Música en espera; Arriba parias de la tierra, en pie famélica legión…
- Anda que la musiquita. Con lo guapa que queda de fondo la sintonía del PP.
- Mariano. Oye que me pillas en mal momento, estoy preparando el mitin de esta noche. ¿Qué quieres?
- Que retires lo de bellaco. Que cuando lo oí, creí que se presentaba a las elecciones Ruiz Mateo. Ese insulto ya no se lleva ni en los mangos de los paraguas.
- Pues anda que tu expresión también es moderna.
- Bueno, bueno, que no te salgas por peteneras, quiero que retires públicamente lo de bellaco, por muy en campaña electoral que estemos, no te consiento un insulto tan cursi. Sólo te faltó lo de malandrín.
- Pero Mariano, hombre. Mírate el diccionario. Bellaco, en su segunda acepción, quiere decir: astuto, sagaz. Y hay que ser muy sagaz para darse cuenta de que estamos recortando los gastos sociales.
- ¡Ah, bueno! Si es así, me quedo más tranquilo. Otra cosa, ya que estamos. ¿No puedes cambiar la música de la llamada en espera? Es que eso de la Internacional me produce urticaria.
- Lo siento Mariano, ahí no te puedo complacer. Ya me gustaría, ya. ¿Sabes que pasa? Que últimamente me llaman mucho el Fernández Toxo y el Cándido Méndez y a ellos les pone mucho el himno. De esa manera, los dejo “embobaítos” y les entran los recortes por donde tú sabes y yo me callo, de dos en dos y envueltos en papel de regalo. Bueno Mariano, un placer como siempr…
- Espera, espera. Que todavía tenemos que hablar de Bildu y del preso que salió pidiendo el voto para ellos.
- Pero hombre Mariano. ¿Tu crees que hay que tomar medidas por que alguien pida el voto para Bildu? Entonces tendríamos que meter en la cárcel a todos los que pidieran el voto para nosotros. Porque hay que tener delito para votar a los tuyos o a los míos.
- Visto así, igual no vas descaminado. Otra cos…
- Bip, bip, bip.
- ¿Me ha cortado? No, seguro que se ha quedado sin cobertura.