El partido político que en su país representaba a Benazir Bhutto era el Partido Popular de Pakistán el que dirigió hasta su muerte. En Londres no estuvo mucho tiempo, pues en 1985, la ley marcial es derogada en el país y puede volver. Sin embargo el dictador de Pakistán (Muhammad Zia-ul-Haq) iba perdiendo popularidad, y si bien Benazir Bhutto volvió a ser arrestada, su partido consiguió que se convoquen a nuevas elecciones. El mismo Muhammad Zia-ul-Haq había condenado a muerte al padre de Benazir, acusándolo de corrupción y muerte de disidentes políticos. Fue ahorcado el 4 de abril de 1979, cuando su hija aún se hallaba en el extranjero.
Mientras tanto, su hermano Shahnaeas, también es víctima de un atentado en Francia, hecho acaecido en 1985. Pero no todo fue infelicidad, pues por aquellos años de reconocimiento político confirma el deseo de casarse, acto que se concretó en diciembre de 1987 cuando unió su vida a Asif Ali Zardari, en la misma Karachi, que la vio nacer.
Su compromiso con la política
Cuando fueron convocadas nuevas elecciones (beneficiadas por la muerte del dictador Muhammad Zia-ul-Haq) en noviembre de 1988, Bhutto vio con agrado como el pueblo mostró simpatía por el Partido del Pueblo Paquistaní, y así, además de ganar la mayoría de los curules en la Asamblea Nacional, fue elegida primera ministra de su país. Y no sólo por ello hizo historia, sino que además, se consagró como la primera líder política musulmana de un país con predominio de esta religión, que para los ojos de occidente, tiene mucho de conservadora y hasta de machista. Este hecho la catapultó a la fama mundial y su figura fue auspiciada por su alma mater y la Universidad de Oxford, como un símbolo del avance de la democracia y la tolerancia en el mundo musulmán.
En el poder y ya durante la campaña rumbo al ministerio, Benazir fue una gran luchadora en pos de la emancipación de la mujer dentro del mundo musulmán, preocupándose sobre todo por los asuntos sociales y la salud en las que estás se veían inmersas en su tiempo, ya sea por factores económicos como la pobreza, así como culturales, como su padecimiento frente a grupos dogmáticos, por ejemplo los talibanes. Lastimosamente, su gobierno no pudo hacer nada al respecto. Las organizaciones que se oponían a su gobierno formaron una coalición, especialmente respecto al asunto de las mujeres, y no le permitieron derogar leyes en contra o crear nuevas a favor de las mujeres en Pakistán.
Su primer gobierno dejó un gusto insípido y fue quitada del cargo en 1990 cuando es destituida por el presidente Ghulan Ishaq Khan, acusándola de corrupta y por haber infringido la Constitución. Las investigaciones en su contra, mientras tanto, se abrieron paso y se investigó las cuentas tanto de su esposo como de ella en su país y en Europa. Al parecer su esposo, Zardari, había perpetrado algunos actos de mal manejo de dinero en la adquisición de aviones para Pakistán. Por ello, este último iría a la cárcel varios años.
Gran parte de la oposición venía de los sectores económicos feudales ultra-conservadores, los que vieron con poca gracia las reformas que la primera ministro implementó en el país. Pese a todas las críticas, es verdad que también gozaba con gran respaldo y tenía popularidad, lo que le permitió ganar otras elecciones en octubre de 1993. Sin embargo, fue casi imposible poder llevar a cabo un gobierno en paz. Sus detractores seguían acusándola de corrupta. Ella, con todos sus medios, se encargó de desmentirlo. Al final nunca pudo ser comprobado totalmente su inocencia. En 1989 ya había publicado su segundo libro: Hija del destino, ; y obviamente su reconocimiento mundial en pos de la emancipación de la mujer en su país le valieron el reconocimiento de sociedades feministas y de Derechos Humanos, ganando el premio Bruno Kreisky. En 1999 hubo otro golpe de estado y se vio obligada a dejar definitivamente el poder.
Muerte de Benazir Bhutto
En los siguientes años se exilió. Hasta el 2007 vivió en Emiratos Árabes Unidos manteniendo contacto con su partido y sus respectivos seguidores con la esperanza de volver al poder. Además, hizo numerosos viajes al extranjero con el fin de conseguir apoyo para instaurar una verdadera democracia en su país, así como para continuar con la emancipación de las mujeres del Islam. Londres era otro de sus lugares preferidos donde podía gozar de inmunidad política. Así entonces, pasado casi ocho años, en octubre del 2007 regresa a su Karachi local. Tuvo buena acogidabby el presidente de turno abolió totalmente los casos que la acusaban por corrupción. Sin embargo, no todo fue color de rosa, pues ni bien tocó suelo pakistaní comenzó a sufrir intentos de asesinato y amenazas. En Karachi, un atentado el día de su regresó mató a más de cien personas. ¿Quiénes eran estos enemigos? Obviamente el grupo fundamentalista de los talibanes junto con la organización terrorista Al Qaeda, que no veían con buenos ojos la política democrática de Benazir Bhutto. Por otro lado, el presidente Pervez Musharraf tenía un gobierno con rasgos autoritarios, por lo cual, era evidente que ella quería lanzarse otra vez al cargo de primera ministra. Con el apoyo de Washington y Londres, parecía que su posibilidad de volver estaba cercana. Esto encendió la mecha de Al Qaeda y los grupos fundamentalistas islámicos.
Su vida corría peligro, y poco más de dos meses desde su llegada sufrió un atentado, falleciendo el 27 de diciembre del 2007. No se precisa aún si la causa de la muerte fue una herida de bala en el cuello mientras saludaba a sus seguidores desde un vehículo o la bomba que se detonó segundos después….