Revista Opinión
Lo mencionamos en un post anterior: Los hombres y mujeres del siglo XXI queremos TRANSPARENCIA en todo....Benedicto XVI también. Antes de hablar de "nueva evangelización"
tienen que dar al mundo un claro mensaje de transparencia en todas sus acciones.
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Tomado de: Agenciacatolicadeprensa.com
El Papa Benedicto XVI instituyó, a través de un Motu Proprio, la Autoridad para la Información Financiera (AIF), la primera institución en la historia del Vaticano que se ocupa de la vigilancia de las actividades financieras de la Santa Sede. Según explicó el portavoz de la Santa Sede, el padre Federico Lombardi, la AIF responde "a la necesidad de trasparencia" de las actividades económicas del Vaticano y es "un primer paso" para entrar en la llamada 'lista blanca' en ámbito internacional. Sin embargo, reconoció que "todavía queda camino por hacer".
Lombardi explicó que estas nuevas leyes creadas por Benedicto XVI son el desarrollo de una modificación que se ha realizado "de forma global" en todo el mundo. Además, anunció que la nueva institución entrará en funcionamiento a partir del 1 de Abril de 2011.
La AIF se crea con el fin de "prevenir y contrastar el fenómeno del lavado de dinero" y controlar las actividades financieras de los dicasterios de la Curia Romana, así como de todos los organismos y entes dependientes de la Santa Sede.
El Vaticano hizo públicas este jueves cuatro normas, que se unen a las leyes ya existentes dentro de la ciudad, que miran a la "prevención y lucha contra las actividades ilegales en los terrenos financiero y monetario" dentro del Estado Vaticano, así como una ley "sobre prevención y lucha contra el lavado de dinero procedente de actividades criminales y contra la financiación del terrorismo".
A través de las nuevas leyes publicadas, el Estado de la Ciudad del Vaticano unifica sus normas económicas a las normas europeas antifraude y antiblanqueo de dinero y pondrá en práctica la 'Convención Monetaria' firmada por la Comisión de la Unión Europea y el Estado de la Ciudad del Vaticano el pasado 17 de diciembre del año 2009.
En esta Convención participaron representantes del Vaticano y de la Unión Europea, así como miembros de la Organización de Cooperación y Desarrollo Europea (OSCE) y el Consejo de Europa, según declaró el portavoz de la Santa Sede. Además, participaron en la elaboración de las leyes, miembros del Banco Central Europeo.
Asimismo, esta Convención Monetaria establece que el Vaticano deberá cumplir las directivas europeas relativas a la acuñación del euro con la imagen del Papa que, según puntualizó Lombardi, están en circulación desde el 1 de enero de 2010, a través de los diferentes negocios que se encuentran en la Ciudad del Vaticano, como la farmacia, la Librería Editorial Vaticana o la oficina postal.
Por otra parte, el padre Lombardi señaló que el Instituto para las Obras de Religión (IOR), que actúa en la práctica como banco de la Santa Sede, así como todas las instituciones económicas y financieras, incluidos los dicasterios de la Curia Romana, estarán bajo la jurisdicción de la AIF. Esta nueva institución se constituye también como único interlocutor del Vaticano para coordinar las actividades financieras con el resto de organizaciones internacionales.
Además, las entidades financieras del Vaticano tendrán la obligación de rendir cuentas ante la AIF al final del año, así como presentar los informes sobre sus actividades e informar sobre los clientes que poseen una cuenta corriente en las entidades, además de identificar a todas aquellas personas que trabajan para la Ciudad del Vaticano o la Santa Sede. De esta manera, todos los entes deberán actuar de forma transparente en la administración de los fondos del Vaticano.
La Oficina de prensa del Vaticano señaló a la Agencia Europa Press que esta institución se ocupará tan solo de los cuatro entes económicos del Vaticano y no de las diócesis, que mantienen su propia independencia en los asuntos financieros. Los cuatro entes económicos pertenecientes al Vaticano son la Administración del Patrimonio de la Sede Apostólica (APSA), el IOR, la Prefectura de Asuntos Económicos y el Instituto 'Propaganda Fidei', el organismo más independiente de la Curia Romana. Según esta nueva ley vaticana, la AIF estará formada por un Consejo de Administración, que elegirá a su Presidente por un período de cinco años.
Además, este Consejo de Administración deberá elegir por unanimidad a un director, que será quien gestionará las actividades de la AIF. El presidente de la AIF tendrá la obligación de presentar un informe anual ante la Secretaría de Estado del Vaticano.
Aunque hace varios meses el Instituto de Obras de Religión (IOR), llamado 'banco vaticano', se enfrenta a un proceso ante el Tribunal de Roma por un presunto fraude fiscal y de blanqueo de dinero, el padre Federico Lombardi aclaró que estas nuevas normas "no tienen nada que ver" con el proceso al IOR y que "simplemente son la aplicación de la Convención firmada con la Unión Europea" ya que esta convención "fue firmada antes del inicio del proceso".
Leer: Carta apostólica para el combate a las actividades financieras ilegales