Beneficios de realizar manualidades con hijos

Beneficios de realizar manualidades. Puede parecer que el que los niños realicen actividades manuales es una cosa sin importancia. Sin embargo, a través de ellas nuestros peques obtienen unas destrezas y conocimientos que no podrían adquirir de ningún otro modo.

Colorear dibujos, pegar bolitas de papel o recortar plantillas son ejercicios que permiten despertar nuestros sentidos y los de nuestros hijos.

Haciendo con ellos manualidades les ayudaremos a enriquecer su capacidad de comunicarse y de expresarse. Además, ampliarán su capacidad de ver, comprender e interpretar el mundo.

Las manualidades infantiles

Con las manualidades podemos hacer que los niños desarrollen su capacidad de observación. A través de ellas les ayudamos a comprender su entorno.

También es una vía magnífica para que se socialicen. Es un medio para que aprendan a comunicarse, a establecer un dialogo con los demás, a escuchar y a compartir.

Hay multitud de actividades muy divertidas para hacer con los peques: figuras de plastilina, manualidades con rollos de papel higiénico, cuadros con tiza, recortables, manualidades con cartones de huevo...

Para ello, lo primero de todo es conocer en qué consisten este tipo de actividades y los Beneficios de realizar manualidades de forma cotidiana.

Beneficios de realizar manualidades con hijos

Aunque no lo parezca, las manualidades conforman un lenguaje universal. A través de esta gramática, en gran medida visual, los niños se expresan y se comunican con el medio que les rodea. Así que los Beneficios de realizar manualidades con nuestros hijos son enormes.

A continuación os voy a mostrar algunas de ellas y cómo ayudan a mejorar las capacidades. ¡Seguro que no habíais pensado en todas las posibilidades que ofrecen estas actividades con nuestros hijos!

La imaginación

Haciendo actividades manuales desarrollan su imaginación. Innovar y crear les aporta el modo de encontrar soluciones a las dificultades que se les presentan.

Al mismo tiempo, al abrir su mente, les permite adaptarse mejor a los cambios. También a ser más tolerantes y a mejorar la capacidad de superar la frustración.

Su creatividad se verá alimentada constantemente. Muchos trabajos sólo les indican el procedimiento de manera general. Y son los mismos niños quienes transforman la manualidad según sus propios gustos.

La socialización

Al interactuar con otras personas, sean otros niños o adultos, aprenden sin darse cuenta unas normas de comportamiento. En ocasiones deberán esperar su turno, pedir ayuda en algo, expresar lo que quieren conseguir...

Trabajando en grupo o en parejas, todos los integrantes tienen un objetivo en común que quieren alcanzar. Para ello, deberán crear equipo y colaborar. Con la práctica de las manualidades, irán desarrollando mayor empatía y compañerismo.

Además, ya os hablé en otro post sobre lo importante que es el juego compartido a la hora de desarrollar las habilidades sociales.

Habilidades motrices

Sin duda, realizando diversas manualidades se adquieren todo tipo de destrezas. Recortar, pegar, unir, atar... Son todos ellos ejercicios de habilidad muy necesarios en el desarrollo.

¡Incluso las aptitudes para la lectura y la escritura se pueden ver mejoradas! La coordinación oculo-manual es un paso fundamental para adquisiciones posteriores.

Al estimularse los movimientos psicomotrices, favorecemos el crecimiento integral del niño. Tanto en el aspecto mental como en la parte física.

La concentración

Para obtener un resultado, los peques demuestran una enorme capacidad de atención. Las manualidades requiere tener todos los sentidos puestos en esa actividad. Aunque se trate de niños pequeños, con actividades acordes, irán potenciando sus habilidades.

El arte y las manualidades consiguen obtener y reforzar un montón de valores. Alguno de ellos es la perseverancia, el afán de superación. Prestando cada vez mayor interés en el trabajo bien hecho, los niños van percibiendo y entendiendo el mundo desde diferentes puntos de vista.

Consejos para preparar una manualidad

Antes de ponernos "con las manos en la masa", hay que plantearse algunas cuestiones. Teniendo en cuenta estas recomendaciones, conseguiremos que cualquiera de nuestras actividades con los peques sea todo un éxito.

• Es mejor pensar y preparar la manualidad con tiempo. Así, haremos acopio de todo el material que vamos a necesitar y tendremos en cuenta el lugar donde realizaremos la actividad. En muchos casos, además, será necesario proteger la ropa y los elementos cercanos. De este modo, evitaremos disgustos porque alguna cosa pueda mancharse o estropearse al realizar la actividad.
• Alentar a los peques para que realicen ellos solos las manualidades. Aunque nosotros los padres les guiaremos y ayudaremos en todo momento. Pero es importante estimular la creación propia y dejar rienda suelta a la imaginación y creatividad de los niños. Lo que cuenta, más que los resultados finales, es el proceso llevado a cabo y la diversión.
• Las manualidades que vayamos a realizar han de ser satisfactorias y placenteras en todo momento. Aún así, no perderemos de vista la capacidad de esforzarse. ¡Venciendo y superando las dificultades que se van presentando también se aprende!
• En cualquiera de las actividades, si hay varios niños, es interesante potenciar el trabajo en equipo. Ante posibles roces o conflictos, lo mejor es evitar dar la razón a ninguno en concreto. Hay que propiciar un clima de colaboración entre ellos. Donde no llegue uno, puede ayudar el otro.

• Mantener y crear un buen clima de tranquilidad y de confianza. Aportando seguridad en las capacidades del niño. Es un momento de experimentación, así que ha de ser algo acogedor y gratificante.
• No hace falta conocer todas las técnicas, ni ser un profesional. Las manualidades para niños que podemos encontrar son de lo más variado. Pero sí que es útil informarse de la dificultad que comportan. Por lo tanto, las actividades deben ser las adecuadas e ir en concordancia con la edad y las capacidades de los peques.
• Tampoco viene de más armarse de una gran dosis de paciencia. ¡A veces a los niños no les salen las cosas como ellos quieren y protestan! Lo mejor es que podamos ir adaptándonos a los posibles imprevistos que vayan surgiendo.

¡Manos a la obra!

Conociendo todos estos Beneficios de realizar manualidades con hijos sin duda no os costará reconocer que merece la pena. Disfrutar y compartir estos momentos con nuestros pequeños es una experiencia muy constructiva que no podemos dejar de lado.

No sólo los niños se beneficiarán de todos los conocimientos y aptitudes conseguidas. Si no que nosotros, viviéndolos y compartiéndolos con ellos ¡obtendremos una recompensa increíble!

La satisfacción de crear y construir algo juntos es una gran aportación para todos. Por no hablar de la alegría de poder mostrar día a día sus avances. ¿A quién no le gusta decorar la casa con las bonitas creaciones de sus hijos? Pues si encima hemos colaborado en que las puedan llevar a cabo, más todavía.

Así que no olvidéis, hacer manualidades con nuestros peques es en beneficio de todos y un momento especial en familia, ¿no os parece?