Continuando con el artículo que escribí hace ya tiempo Beneficios de Colecho I, en el que explicaba sobretodo el punto de vista científico del colecho y los beneficios que tanto niños como padres obtienen con su práctica, ahora quiero centrarme en los beneficios que el colecho tiene sobre la lactancia materna.
Como asesora de lactancia, he escuchado muchas veces las dudas de las mamás recientes sobre las tomas nocturnas del bebé.
Resulta que al levantar al bebé de la cuna para darle el pecho se despierta y luego cuesta más dormirlo, además la propia mamá está más despejada al tener que levantarse pra dar la teta y generalmente, cuando intentan volver a colocar al bebé en su cuna, se pone a llorar y protesta.
Por otra parte, si el bebé duerme en otra habitación el despeje de todos es aún peor, porque el bebé tiene que llorar para que su madre le oiga, la madre tarda más en atender su llanto y eso pone más nervioso al bebé (y a la madre, porque el llanto de tu bebé te remueve las entrañas) y esto crea un círculo vicioso en el que dar el pecho por la noche se convierte en un problema.
Algo tan sencillo como colocarte al bebé a tu lado, en tu cama resuelve de un plumazo todas estas pegas:
1. el bebé no llega ni a despertarse del todo, cuanto tiene hambre mama tumbado tal cual está
2. no se le lleva a ninguna parte cuando termina su toma, se queda dormidito tan a gusto
3. la mamá tampoco se despierta casi para dar el pecho, lo puede hacer medio dormida. De hecho, es muy habitual que las mamás que duermen con sus bebés no saben decir con exactitud cuántas veces se ha despertado para tomar teta, porque ellas mismas estaban dormidas
4. la leche materna cambia su composición durante el día y casualmente a las 4 de la mañana alcanza su pico en niveles de triptófano y melatonina. El triptófano es una sustancia que ayuda a conciliar el sueño y la melatonina induce tanto el sueño que incluso hay medicamentos elaborados con este principio activo para administrar a los niños que “no duermen bien”. Este sistema en el que se van variando las cantidades de estos compuestos en la leche materna, es lo que ayuda al bebé a ir madurando sus ritmos circarianos y así progresivamente llegar a los que tendrá de adulto
5. la prolactina que lleva la leche maternba también ayuda a dormir, tanto a la madre como al bebé
Por otra parte, la proximidad del bebé hace que la mamá produzca más leche y favorece a que el bebé mame más veces tanto de día como de noche, evitando así hipoglucemias. La prolactina, que se encarga también de la producción de leche, tiene su pico entre las 2 y las 6 de la mañana, por lo que las tomas que se produzcan entre estas horas, ayudan a producir la leche necesaria para el día siguiente.
Una vez más, la ciencia da la razón a la lógica.
Si duermes con tu bebé, duermes más y mejor y además el bebé también.
¿Qué opinas? ¿nos animamos a dormir con nuestros bebés o seguimos levantándonos 20 veces por la noche
?