Según un artículo de Roselyn Sulcas del New York Times de hoy (aquí), la tan anunciada sucesión de Brigitte Lefrevre (que se retira a finales de esta temporada) ha recaído en Benjamin Millepied.
Una elección un tanto sorprendente para la jerarquizada ópera. Millepied es de origen francés, pero de Burdeos, estudió en el Conservatorio de Lyon, pero terminó sus estudios ya en la escuela del American Ballet. Lleva retirado desde 2011, pero toda su vida profesional como interpreta la pasó en el New York City Ballet. Su trabajo como coreógrafo ha tenido críticas mixtas, aunque es más conocido por haber estado (que no hecho nada interesante) en Black Swan.
Millepied ha dicho que le propusieron la posición en noviembre, a través de Stéphane Lissner, que será el próximo director general de la Ópera a partir de 2015.
Debido a su perfil, es una elección bastante ‘show-bussiness’ para la organización de la Ópera, que, por todos es sabido, prefiere a la gente de la casa. Millepied tiene una pequeña experiencia previa cómo director, pero de pequeños grupos de gira como el ‘LA Dance Project’.
“Tengo una gran admiración por la forma en que Brigitte ha traído a coreógrafos cómo Jérôme Bel o Pina Bausch al repertorio”, dijo al NY Times. “Pero mi interés se centra en el desarrollo de la técnica y el arte del ballet, que es tan rico e interesante. Esta es una compañía clásica grande, y yo quiero que sea un medio para la evolución y el conocimiento del idioma del ballet. Quiero desarrollar una nueva identidad, realmente desafiar a los bailarines, hacerles bailar ballets que no son sólo los clásicos “.
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