Cuando uno es un simple turista muchas veces se ve sumido en experiencias masivas o de colas que son fácilmente evitables. Cuando visitas el Bundestag en Berlín, si no has sido suficientemente previsor, y reservado tu entrada on line, se puede dar el caso de que tengas que esperar en una larga fila, o simplemente que no puedas entrar a visitar este emblemático edificio de la capital alemana por tu imprevisión.
Una opción super Cool y no muy conocida es reservarte una mesa para comer o desayunar en su bellísimo DachGarten Restaurant, que está en la terraza al lado de la cúpula acristalada diseñada por Norman Foster, y así consigues poder entrar al edificio sin colas y luego de una experiencia gastronómica , sales a visitar el edificio. Puedes reservar en este enlace: Feinkost-kaefer
De ese modo, haces un total desayunando con unas vistas estupendas sobre la ciudad, que dadas las cantidades podríamos catalogarlo como un "brunch".
Es una excelente oportunidad para probar delicatessen alemanas, ya que el restaurant , es regenteado por la empresa Käfer , que responde al apellido de la familia que lo lleva adelante y que fue creada en 1930 en Munich con un simple negocio de vinos y licores. Son de esas empresas que son respuesta a una pasión familiar, y que desde entonces no ha hecho más que crecer.
Ahora , la empresa Käfer es una potencia gastronómica, que ha diversificado su negocio al sector de las delicatessen, de la restauración a gran escala, tanto en caterings, como en servicios en lugares emblemáticos.
En el caso que nos ocupa Käfer lleva no sólo el restaurante público del Bundestag, sino también el restaurant de los diputados del Parlamento, como así sitios curiosos como el de la empresa BMW, o parece que tienen un supersitio en la OktoberFest, en Munich, que es muy famoso.
La carta de desayuno nos ofrece varias propuestas:
La más ostentosa es la que llaman Feel Good Breakfast, que nos recibe con una copa de champagne GIO Secco, café o té. Luego para comer tenemos pan orgánico de cereales, bandeja de quesos alemanes y holandeses, fruición de fiambres y salmón. Como si esto fuera poco lo acompañamos con Huevos revueltos orgánicosy fruta y yogurt. Todo por 28,50 € por persona.
También tenemos la opción Bavarian Breakfast que nos propone una selección regional de pastel de carne, ternera de bavaria, Obatzda casera, Greaves Lard (que son unos crujientes convertidos de carne con grasa de cerdo) y los famosos pretzels con algo de chucrut. O sea , casi un almuerzo, y todo eso por 17,50
Está la opción ligera del Strammer Max, en el que te sirven jamón ahumado, pan casero de crispies, queso montañes, huevos orgánicos y lechuga por 14,50€
Nosotros optamos por el Fit Through Berlín , que viene con un delicioso jugo de frutas y verduras verdes. Como sólido probamos una exquisita tarta vegetal dulzona, huevos poche orgánicos, un pastelito vegano, un pan de croutons, y una salsa exquisita de hierbas. Todo eso por 18€
Luego , no nos quisimos perder la posibilidad de probar las deliciosas tartas: estamos en Alemania:
Si alguno de los miembros de tu familia o grupo no quisiera desayunar tan copiosamente, te puede acompañar tomándo un café o un vino espumoso a tarifas normales de este país.
No dan ganas de irse de este lugar, la cristalera invita a quedarse a tener la vivencia de Berlín desde el aire. Una vez que acabas , ya estás arriba en la cúpula -hemos subido en ascensor- y puedes hacer la visita en sentido contrario, ya que irás bajando por la rampa en forma de caracol.
Antes de ello, puedes hacer un recorrido historiográfico y cronológico de la historia de este trágico edificio, que finalmente , con la reunificación alemana, se convirtió en el parlamento. Hay una curiosidad que nos enteramos aquí: la sede legislativa hasta 1991 de alemania occidental funcionaba en Bonn, y el traslado a Berlín fue sometido a votación de los diputados y el traslado ganó por una escasa mayoría.
La verdad es que toda la atención a esta visita se la lleva la espectacularidad de la cúpula de Foster que fue construída en 1996, y que pone una guinda al edifico neorenacentista construído en 1894. Como toda intervención moderna en un edificio clásico esta cúpula estuvo llena de controversia, y adquiere mayor dimensión de lo acertado cuando estás dentro. La visita es gratuita , y puedes reservarla en