Aprovechando los festivos de la Semana Santa estuvimos unos días en Berlín. Ha sido la primera vez que visitábamos la capital alemana y a pesar del frío y de la nieve que no ha dado tregua ni un solo día, lo disfrutamos al máximo.
Nevando en Berlín. Puerta de Brandenburgo
Conocer uno de los escenarios más importantes de la historia reciente, de nuestra historia, ha supuesto un continuo aprendizaje y a la vez un gran ejercicio de reflexión.Los bombardeos de la II Guerra Mundial destruyeron gran parte de su patrimonio; tras la reunificación se inició un proyecto de remodelación de la ciudad que aun no ha terminado y las grúas ya forman parte del paisaje urbano.El binomio pasado – presente se hace evidente en muchas calles y plazas de Berlín y tras más de 20 años de la caída del muro, las diferencias entre los dos lados son todavía muy notorias a pesar de los esfuerzos.
Terraza del hotel
Terraza del hotel
Trabant, el coche de la RDA
Es una ciudad ideal para pasar cuatro o cinco días, o muchos más si la intención es visitar todos los museos, porqué hay material para rato.No sé por qué me daba una cierta pereza viajar a Berlín pero me ha sorprendido, me ha gustado y me he quedado con ganas de repetir. Berlín está de moda, por Semana Santa, cerca de dos millones de visitantes nos paseábamos bien abrigados por sus calles y en julio de 2012 superó a Roma en número de turistas.Supongo que su atractiva historia y su amplia oferta la han convertido en uno de los destinos europeos de primer orden.Decoraciones de Pascua
Decoraciones de Pascua
Y los típicos huevos de chocolate en la recepción del hotel
Berlín es también un buen ejemplo de ciudad de contrastes, y en la reconstrucción de los edificios o espacios más emblemáticos se ha jugado con la combinación de los modelos originales añadiendo elementos de modernidad que han sido diseñados por los más prestigiosos arquitectos internacionales.En esta entrada me apetece resaltar algunos de estos aspectos o simplemente comentar lugares que me han gustado o llamado la atención.Edificio del Reichstag:
Desde su construcción en 1894 se ha venido utilizando para funciones parlamentarias.Al final de la II Guerra Mundial quedó muy dañado y en los años 60 empezó su reconstrucción siguiendo el estilo neorrenacentista original. Fue más tarde, en los años 90 cuando el arquitecto Norman Foster le dio ese aire de modernidad añadiendo la fabulosa cúpula de cristal. Desde 1994 se reúne cada cinco años la Convención Federal para elegir presidente del país y desde 1999 es lugar de reunión del Bundestag o Parlamento alemán.
Reichstag
Cúpula de Norman Foster
La cúpula se puede visitar, aunque debido a la gran afluencia de público, es indispensable reserva previa. Tras el control de seguridad, un ascensor conduce hasta la gran cúpula de
40 metros de diámetro. Por su interior suben dos rampas en espiral que conducen a la parle más elevada que acaba en un agujero abierto al cielo. Aparte de ser un buen mirador, la cúpula tiene las funciones de iluminar y ventilar la sala de plenos que se ve justo debajo. La luz se enfoca hacia el interior de la sala gracias a los 360 espejos dispuestos en forma de embudo.Cúpula de Norman Foster
Potsdamer Platz y Cúpula Sony:Había sido un lugar de moda en tiempos pasados pero quedó totalmente arrasada por las bombas. Dividida por el muro de Berlín, quedó prácticamente olvidada durante años. Tras un ambicioso proyecto de reconstrucción vuelve a ser uno de los centros neurálgicos de Berlín. Los rascacielos dominan la plaza y la cúpula Sony es el elemento más característico. Se trata de una gran estructura de acero y cristal que va cambiando de color, lo que por la noche la hace muy llamativa. Bajo la cúpula se encuentran restaurantes, cafeterías, tiendas y un multicine. Por cierto, la Berlinale se celebra en esta plaza.A simple vista, poca cosa queda de tiempos pasados pero unos fragmentos de muro nos ayudan a recordar.
Cúpula Sony en Potsdamer Platz
Fragmento de muro en Potsdamer Platz
Bajo la cúpula Sony que va cambiando el color de su iluminación
Metro de Berlín
El Muro:
La noche del 9 al 10 de noviembre de 1989 y tras 28 años desde su construcción, caía no sólo un muro sino todo un modelo político y social. De los 155 kilómetros de muro (45 kmdentro de la ciudad) poca cosa queda. Aparte de los fragmentos que se conservan en Potsdamer Platz, el tramo más largo se puede ver a orillas del río Spree, en el distrito de Friedrichshain – Kreuzberg. Se trata de 1316 metros que se conocen con el nombre de East Side Gallery, donde artistas de todo el mundo expresan su arte, llaman a la libertad y dan color a ese trozo de pared gris de casi 4 metrosde altura. Con sus 300 torres de vigilancia, 30 puestos de control y vigilado por 11.000 policías, constituía una muralla inexpugnable. Más de 5000 personas intentaron cruzar el muro, algunas de ellas lo consiguieron con éxito, la mayoría fueron detenidas y otras murieron tiroteadas. En el más famoso puesto de control, Check Point Charlie, se ha recreado una caseta de vigilancia y en el museo se explican algunas de las historias más curiosas y de cómo se las ingeniaron algunos berlineses para cruzar.East Side Gallery. Muro de Berlín
En Check Point Charlie. Dictadores actuales
En Check Point Charlie. Línia que indica donde se levantaba el muro
Iglesia Kaiser Wilheim:
Se encuentra en el bulevar Ku'damm y es uno de los ejemplos más evidentes de la destrucción de los bombardeos de la II Guerra Mundial. Esta gran iglesia fue construida a finales del siglo XIX por el emperador Guillermo II en honor a su abuelo. De sus cinco torres sólo se salvó una y se decidió conservarla como memorial. Junto a ella se levantaron dos edificios modernos que se caracterizan por sus miles de cristales azules.En el interior de la torre antigua (actualmente en restauración) se pueden ver dos maquetas del aspecto de la iglesia antes y después del bombardeo del 23 de noviembre del 1943. Los mosaicos recuerdan la vida del emperador Guillermo I a quien se dedicó el templo.Iglesia Kaiser Wilheim, parte nueva
Mosaicos en el interior de la torre
Iglesia de San Nicolás y Nikolaiviertel (o barrio de San Nicolás):
Con sus dos torres gemelas, la Iglesia de San Nicolás (1230) es la más antigua de Berlín. Se encuentra en el barrio del mismo nombre situado entre el río Spree, el Ayuntamiento y la Spandauer Strasse. Esta zona quedó también muy maltrecha y en 1981 el gobierno comunista de la RDA inició un proceso de reconstrucción de todo el barrio. Algunas críticas hablan de un resultado artificial pero a mí me pareció un lugar encantador, con calles estrechas y empedradas, pequeños restaurantes y tiendas con encanto. Quizás la nieve ayudó a darle esa imagen bucólica y de postal.Iglesia de San Nicolás
Barrio de San Nicolás
Barrio de San Nicolás
Barrio de San Nicolás
Alexander Platz:
Alex, como la conocen los berlineses, tomó el nombre del zar Alejandro I cuando visitó la ciudad en 1805. Tras la separación por el muro quedó en pleno centro del Berlín Este. Lugar de encuentro, de grandes manifestaciones y de conciertos.Destaca la torre de televisión que se ve de cualquier punto de la ciudad y la torre de la Iglesia de Santa María (Marienkirche, 1270) casi tan antigua como la cercana de San Nicolás. El vistoso Ayuntamiento Rojo, llamado así por el color de su fachada y la monumental (aunque sin agua) Fuente de Neptuno que me recordó las fuentes de la Plaza Navona en Roma. En este caso, rodeando al dios Neptuno se encuentran cuatro figuras femeninas que representan a los cuatro ríos más importantes de Alemania: Elba, Rin, Oder, Vístula.En Alexander Platz también merece la pena prestar atención al curioso reloj que indica la hora mundial.Torre de Marienkirche y torre de la televisión
Interior de Marienkirche
Neptuno y Torre de Marienkirche
Imagen de la Fuente de Neptuno y cúpula de la Catedral
Original reloj en Alexander Platz
Nevando en Berlín, bajo la torre de televisión
Neues Museum:En nuestro caso y debido a los pocos días de que disponíamos, decidimos visitar un solo museo y la elección fue el Neues Museum. Tras su larga remodelación se reabrió en octubre de 2009. Aquí es donde se puede admirar el famoso busto policromado de Nefertiti, una preciosidad (no está permitido hacerle fotos).Nos decidimos por visitar este museo ya que teníamos la oportunidad de ver la exposición temporal dedicada a los 100 años del descubrimiento del busto de Nefertiti en Amarna y que finalizará el próximo 4 de agosto.Apuntes del egiptólogo alemán Ludwig Borchardt (1912)
En Neues Museum hay una excelente colección de arte egipcio
Exposición: In the Light of Amarna. 100 years of the Nefertiti discovery
Calles de Berlín:
Cuando se camina por la avenida Karl-Marx Allee da la sensación que te encuentras en otra ciudad. Sus edificios sobrios y grises de estilo soviético siguen una simetría casi perfecta. Es la avenida que la RDA “enseñaba” al mundo por televisión, donde se realizaban los grandes desfiles militares y los actos más importantes.Mientras, al otro lado de muro, Kurfürstendamm conocida como Ku’damm se iba convirtiendo en la calle más glamorosa de la RFA con un gran número de tiendas, teatros, restaurantes y locales de ocio.
Avenida Karl - Marx Alle
Arquitectura de estilo soviético en Karl Marx Allee
Ku'damm
Tiendas:Para todos los gustos: Desde los famosos grandes almacenes KaDeWe a pequeños puestos callejeros.Tampoco faltan los candados en algunos puentes