Bernie Sanders y Spike Lee.
Emma Brockes entrevista al cineasta Spike Lee y al político Bernie Sanders en XLSemanal. Ambos muestran sus preocupaciones sobre el nuevo rumbo que pueda dar Trump a la política americana. “El mundo ha cambiado y es aterrador” concluye B. Sanders, mostrando sus preocupaciones. Se trata del rival de Hillary Clinton en las primarias demócratas, y de su rival, el cineasta y activista Spike Lee, dos figuras de peso en Estados Unidos. Se trata de un político con 40 años de experiencia que quiere combatir a la política con política y que no admite lamentos. Por su parte, Spide Lee, fundador del movimiento cinematográfico, New Black Cinema, es el cineasta negro más influyente de Estados Unidos, con películas como ‘Haz lo que debas’, ‘Malcolm X’ o ‘La marcha del millón de hombres’. Spike Lee es todo emoción. Apoyó a Sanders en las primarias para ayudarlo a mejorar su popularidad entre los negros y ahora es un representante de la oposición total contra Trump. Bernie Sanders lleva en política desde los años sesenta. Se opuso a la guerra de Irak, luchó contra los recortes de impuestos de Bush, defendió la asistencia sanitaria universal de salud o los derechos civiles y se opuso a las políticas de vigilancia masiva. E. Brockes resume así sus intervenciones:
Bernie Sanders. Nos enfrentamos a tiempos muy difíciles. Pero tenemos que seguir adelante y me gustaría contar contigo.Spike Lee. Claro, haré todo lo que pueda para ayudar. Pero ¡mire la gente que Trump está nombrando para su equipo! Bernie Sanders: “No creo que los americanos quieran deportar a millones de personas. Pero sí que hay un montón de gente a la que le van muy mal las cosas”Lee. A mí me parece que, en el fondo, todo es una reacción a aquel día en que Obama puso su mano derecha sobre la Biblia de Lincoln. Todo empezó cuando un negro se convirtió en presidente.Sanders. Bueno, en parte es así, pero esa no es toda la verdad. Personas que votaron a Obama en dos elecciones ahora han optado por Trump. No voy a negar que haya mucho racismo, xenofobia y sexismo, pero también hay un montón de gente a la que le van muy mal las cosas. Que tiene dos o tres trabajos a la vez y está preocupada por sus hijos, no pueden llevarlos a la guardería o a la universidad; y entonces llega Trump y les dice: ‘Soy el defensor de la clase trabajadora’… y la gente lo creyó.Spike Lee: “A mí lo que me quita el sueño es que Trump tenga los códigos nucleares”Sanders. Ahora hemos de trabajar en tres áreas. La primera: enfrentarnos a Trump con uñas y dientes si vemos que da algún paso hacia el racismo, la xenofobia y el sexismo e intenta dividir nuestro país. La segunda: si va en serio con lo de crear más empleos y subir salarios, debemos colaborar con él. Pero otra cosa te digo: lo que más me preocupa es que cree que el cambio climático es un engaño.Lee. ¡Este hombre tiene los códigos! (...)Lee. Cuando me desperté la mañana siguiente a las elecciones, el mundo había cambiado.Sanders. Un mundo muy diferente. Y muy aterrador. Pero tenemos que ir más allá de eso.Lee. ¿Cree que sus votantes no van a obligarlo a que cumpla todas esas cosas atroces que dijo?Sanders. Lo que tenemos que hacer es obligarlo a que se atenga a lo que dijo sobre lograr salarios más altos y crear nuevos puestos de trabajo y plantarle cara en lo demás.Lee. Pero ¿cómo lo vamos a hacer si los republicanos tienen la mayoría en la Cámara de Representantes y en el Senado?Sanders. Lo vamos a hacer porque el pueblo estadounidense apoya nuestras posiciones y no las de Trump. Lucharemos duramente por la subida del salario mínimo, por la creación de millones de puestos de trabajo, por universidades libres de tasas académicas, por una solución al problema de los créditos a estudiantes, por la atención a los niños… Tenemos que hacer que Trump pase a la defensiva. Y aquí tú puedes hacer una contribución importante, tú y otros como tú, que conocéis los medios de comunicación: tenemos que hacer que la gente se agrupe detrás de una agenda progresista. (…)Lee. Es una pregunta retórica, pero me gustaría que los lectores lo entendieran con toda claridad: ¿qué hacemos ahora? ¿Sigue habiendo alguna esperanza?Sanders. La esperanza está en entender que el Partido Demócrata ha dado muchos tumbos en las últimas décadas. No es solo cuestión de estas elecciones por muy desastrosas que hayan sido. La clave es que los republicanos controlan el Senado, la Cámara de Representantes y en torno a dos tercios de los puestos de gobernador del país. En los últimos ocho años los demócratas han perdido más de 900 escaños en los parlamentos estatales. Para mí, eso significa que el Partido Demócrata tiene que reflexionar muy en profundidad sobre lo que es y hacia dónde va. No puede seguir siendo un partido de la élite liberal, un partido de gente rica. Tiene que volver a ser el partido de la gente trabajadora, tanto negra como blanca como latina. Nuestro partido no va de galas para recaudar donaciones, sino de actos con los sindicatos, con los veteranos de guerra, en el campo, en las ciudades del interior…Lee. El equipo de campaña de Clinton pensaba que heredaría automáticamente a los votantes de Obama. No ha habido el mismo entusiasmo por Clinton que en su día hubo por Obama. (…)