El Día Nacional del Portero en el país vecino, Portugal, los compañeros del blog “Mundo dos Guarda-Redes” , han subido las siguientes declaraciones del portero del Sevilla, Beto Pimparel, que ha revelado cómo se siente acerca de “Ser Portero”. Nos ha parecido tan especial que os lo traducimos para todos vosotros:
“Ser portero … es ser un apasionado del fútbol, independientemente de ser una posición solitaria. Es tener pasión por la responsabilidad, es tener el coraje de disputar cualquier jugada del partido como si fuera el último. Es saber sufrir cuando no hay nadie detrás de ti, tan solo un gigante de 7,32m de ancho y 2,44 m de altura, un gigante que debemos proteger con todo nuestro esfuerzo y cuidado, es nuestro castillo y ahí nadie puede entrar.
Es vestir de forma diferente. Es ser esencial para el inicio de cualquier partido. Es ser amado o criticado en cuestión de segundos. A lo largo de esta montaña rusa de sentimientos que acompañan a la carrera de un portero, tiene que haber un elemento de equilibrio, pero ser valiente al mismo tiempo, tener carácter y personalidad.
Se disfruta de un 1 contra 1, de un tiro a cinco metros, de otro veinte metros y de tener esa responsabilidad de no dejar que nadie invada tu castillo.
Siempre soñé con ser así porque es muy difícil y al mismo tiempo muy especial. Es una profesión demasiado bonita para ser describida en un pequeño texto”
Merece la pena leer unas palabras tan emotivas y que dejan la piel de gallina. Beto es un verdadero enamorado de la portería.
Es vestir de forma diferente. Es ser esencial para el inicio de cualquier partido. Es ser amado o criticado en cuestión de segundos. A lo largo de esta montaña rusa de sentimientos que acompañan a la carrera de un portero, tiene que haber un elemento de equilibrio, pero ser valiente al mismo tiempo, tener carácter y personalidad.
Se disfruta de un 1 contra 1, de un tiro a cinco metros, de otro veinte metros y de tener esa responsabilidad de no dejar que nadie invada tu castillo.
Siempre soñé con ser así porque es muy difícil y al mismo tiempo muy especial. Es una profesión demasiado bonita para ser describida en un pequeño texto”
Merece la pena leer unas palabras tan emotivas y que dejan la piel de gallina. Beto es un verdadero enamorado de la portería.