Las quejas de las creencias supremacistas blancas en las agencias de control de inmigración de Estados Unidos fueron el motivo para que el presidente Joe Biden pidiera fondos en su primera solicitud de presupuesto al Congreso el viernes, pero los funcionarios no ofrecieron ninguna explicación de lo que motivó su solicitud.
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La administración de Biden está pidiendo al Congreso que aumente el nivel de financiamiento para las oficinas de supervisión de la fuerza laboral dentro de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) de EE. UU. Y el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de EE. UU. (ICE) a $ 470 millones, un aumento del 22% sobre el nivel actual, para el año fiscal que comienza en octubre.
El financiamiento adicional garantizaría que las quejas de la fuerza laboral, «incluidas las relacionadas con la supremacía blanca o creencias ideológicas y no ideológicas», se investiguen rápidamente, según un resumen de la propuesta presupuestaria de Biden.
No estaba claro si algún incidente específico provocó el pedido de un aumento de la financiación. El Departamento de Seguridad Nacional de EE. UU. (DHS) y la Casa Blanca no respondieron de inmediato a las solicitudes de comentarios.
Los representantes de la patrulla fronteriza y los sindicatos de ICE no respondieron de inmediato a las solicitudes de comentarios.
La administración Biden ha hecho de la lucha contra el extremismo interno una prioridad. Un informe del DHS de octubre de 2020 dijo que los extremistas violentos nacionales, incluidos los supremacistas blancos, representan «la amenaza más persistente y letal» para Estados Unidos.
Los agentes de la patrulla fronteriza enfrentaron escrutinio en 2019 cuando los medios de comunicación expusieron comentarios racistas y misóginos publicados en un grupo privado de Facebook para agentes actuales y anteriores. Las publicaciones incluían bromas sobre la muerte de migrantes y comentarios sexualmente explícitos que se referían a la representante estadounidense Alexandria Ocasio-Cortez, una demócrata como Biden.
El resumen presupuestario publicado el viernes no hizo una solicitud de financiación similar para el ejército de Estados Unidos, que también ha enfrentado preocupaciones sobre el nacionalismo blanco y otros extremismos en sus filas. El secretario de Defensa, Lloyd Austin, está bajo presión para que demuestre avances en la lucha contra el extremismo después de que se descubriera que miembros del servicio militar actual y anterior participaron en un ataque del 6 de enero contra el Capitolio de Estados Unidos.
John Sandweg, director interino de ICE durante el ex presidente Barack Obama, dijo que si bien las quejas deben investigarse, la decisión de Biden de señalar a los empleados de CBP e ICE corre el riesgo de provocar la oposición de agentes y oficiales.
«Este tipo de lenguaje podría crear algunas preocupaciones en la fuerza laboral de que habrá pruebas ideológicas políticas», dijo Sandweg, y agregó que el lenguaje específico puede cambiar cuando se promulgue el presupuesto.
Sin embargo, es una buena idea aumentar ampliamente los fondos para las oficinas internas que investigan las quejas en el lugar de trabajo, dijo Sandweg.
Con información de Reuters
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