La semana pasada aterrizaba en Madrid, recién llegada desde París, y tan sólo durante un corto espacio de tiempo la Maison Lâncome, el espacio con el que toda mujer soñamos, sin lugar a dudas, una grata experiencia que tuve la suerte de vivir
Cada una de las estancias de la Maison Lâncome estaba dedicada a una de sus líneas, cuidado de la piel, colorido, fragancias, y el maravilloso mundo Wonderland, donde pudimos conocer algunas de las novedades con las que pronto nos sorprenderá la firma. E incluso una sala diseñada por el mismísimo Albert Elbaz, e inspirada en la colección que lanzarán para el próximo verano
Si hubo una estancia que me cautivó, y en la que me hubiera quedado allí, era era la enorme biblioteca del siglo pasado, que la en lugar de albergar libros, sus estantes estaban repletos de las míticas fragancias de la firma como O de Lâncome, La vie est belle, y la mítica Trèsor
Sin lugar a dudas la visita a la Maison Lâncome fue toda una experiencia que no quería dejar de compartir con vosotras