Editorial: Oz Editorial*Gracias a Oz Editorial por el libro*Sinopsis:
A Alyssa Gardner las flores y los insectos le hablan. Teme que su destino sea acabar en un psiquiátrico, como su madre, pues una vena de locura recorre su familia desde tiempos de su antepasada Alicia, la niña que inspiró el País de las Maravillas de Lewis Carroll.
Pero ¿y si los susurros de las flores no son alucinaciones? ¿Y si el País de las Maravillas existe y la está llamando?
Alyssa descenderá por la madriguera del conejo hacia un mundo mágico, pero también despiadado. Durante su increíble aventura, tendrá que decidir en quién confiar: en Jeb, su mejor amigo, por el que siempre se ha sentido atraída, o en el fascinante y seductor Morfeo, su guía en el País de las Maravillas y con el que lleva soñando desde que era niña.
Desde que vi la portada y sinopsis de Susurros, supe que tenía que leerlo pues cumplía con dos puntos que amo encontrar en los libros. Una portada hermosa y una sinopsis atrapante que me hizo replantearme todo lo que conocía del país de las maravillas.
-En el mismo instante en que tu mente aceptó la posibilidad de que el País de las Maravillas fuera real, destruyó la cámara de vacío en que las dudas te habían aprisionado –dice desde algún punto sobre mí-. Ahora, deja de pensar como una humana. La lógica del Reino de las Profundidades reside en la difusa frontera que separa lo lógico de lo absurdo. Si conectas con esa lógica y visualizas que las piezas de ajedrez cobran vida, lo harán. Tienes que creerlo para verlo.
Lo que más disfrute del libro, fue la facilidad con la que la autora plasmo el país de las maravillas. Sin lugar a dudas la autora tomo el mundo de Carroll y lo ajusto de una forma radiante y así convirtió el país de las Maravillas en un mundo hostil y oscuro. Un ambiente que me atrapo por completo. Las descripciones de la autora son tan perfectas que no me costó para nada imaginarme cayendo por la madriguera del conejo o en el castillo de Morfeo.
Otra de las cosas que me gusto del libro fue la historia bien lograda. Como forme vamos avanzando en la historia conoceremos más pistas que nos ayudarán a resolver el gran rompecabezas final. Y vaya final, en lo personal jamás, jamás me espere ese giro y que la autora logrará sorprenderme de esa manera, solo sirvió para que amara más al libro.
-Vamos, vamos. Estar loco no es tan grave -dice las sombra con dos largas orejas, añadiendo sus propias risitas al coro-. Podríamos dejar que nos comiera a nosotros. Ábrele la boca, ya me meteré yo dentro. Siempre he querido ver el interior de un estómago.
Sobre los personajes, a pesar de que Alyssa me ha gustado por enfrentar su mayor miedo al adentrarse en el país de las maravillas, su constaste desvió de pensamientos hacia los dos chicos que la rodean me exasperaron un poco. Sip, sé que lleva toda una vida enamorada de Jeb y que otro poco más de Morfeo, pero siento que había veces en las que exageraba un poco y por estar pensando en los chicos se perdía un poco de lo que estaba pasando. Esa es la única pega que le pongo a Alyssa, por lo demás me ha conquistado.
Por otro lado Jeb… lo siento, pero simplemente no puede con él. Sé que tiene muchas cualidades que lo hacen ser un gran personaje pero que se pasara todo el libro queriendo proteger a Alyssa a tal grado de no dejarla opinar en asuntos que en realidad solo le concernían a Alyssa, me puso de malas. Sip, al principio su actitud de caballero andante me gusto, pero como sé que creyó de más su papel y resultaba pesado.
Pero quien si logro conquistarme a la primera fue Morfeo. Olvidemos por un segundo que Morfeo representa todo lo que me atrae de un personaje masculino (misterio, oscuridad y rebeldía) y concentremos en que ame la forma en la que su sola presencia sacaba la locura del interior de Alyssa. Con Jeb, Alyssa actúa de un modo más recatado, pero Morfeo la anima a sacar todo de sí y aceptar su verdadera naturaleza y eso fue lo que más me conquisto del personaje.
Con Morfeo nunca sabía con qué iba a encontrarme, siempre que pensaba que ya lo tenía calado, va y hace una de sus loqueras y pone todo patas arriba y esa fue otra de las cualidades del personaje que más disfrute.
-Me deseas. Admítelo.
-¿Por qué iba a desearte?
Levanta tres dedos para una cuenta atrás.
-Misterioso. Rebelde. Problemático. Todas las cualidades que las mujeres encuentran irresistibles.
-Qué optimista.
-Mi alcoba nunca está vacía.
-Lástima que el cerebro sí. –Las palabras son duras, pero el afecto de mi sonrisa les quita hierro.
Y aunque la novela no se salva de algunos tópicos de la literatura juvenil (por ejemplo ese triángulo amoroso que a mi parecer fue innecesario), el ritmo ágil que lleva más las increíbles narraciones de la autora y la originalidad que se ha impuesto en la historia de Carroll, hace de Susurros una novela que todo mundo debe de leer.