Revista Deportes
El Barça ha vuelto en la noche de hoy al mundo real, aquel en el que hay un rival capaz de plantar cara, aquel en el que cuesta marcar goles, aquel en el que cuesta ganar los partidos, y a veces, como hoy, no es posible.
Porque es evidente que lo que esta(ba)mos viviendo es algo irreal, un mundo demasiado bonito donde los partidos se ganan por goleada, jugando a un fútbol de ensueño y sin ningún oponente capaz de resistir tal avalancha de juego.
Y para ese aterrizaje en el mundo real ha hecho falta que Pep dispusiera hoy de un once mezclado de jugadores titulares con jugadores reserva y con un jugador por debajo de los reservas como Bojan, y que por otro lado Joaquín Caparrós dispusiera de un planteamiento ultradefensivo que ha funcionado casi a la perfección, imposibilitando que el Barça pudiera desplegar su habitual juego. Aunque parece que la ultradefensa en el Camp Nou la haya inventado uno que perdió el año pasado, los que han conseguido aplicarla correctamente se han llevado dos resultados positivos (0-2 el Boquerón Esteban con el Hércules) y 0-0 en el día de hoy.
Saltó el Barça al campo con las novedades de Pinto (sin trabajo), Abidal de central (sobrado para el escaso ataque vasco), Mascherano en el pivote defensivo (de los pocos que se han salvado, y cada vez más afianzado), Keita (intrascendente hoy como en toda esta temporada, algo pasa con el africano) y Bojan como delantero centro (he perdido ya todas las esperanzas con el de Linyola. Cuando muestre algo, volveré a esgrimir alguna confianza en él). Y un Barça sin el equipo de gala es mucho menos Barça.
Y ni la entrada de Messi y Villa en la segunda parte sirvió para inquietar a la portería de Gorka Iraizoz, donde el equipo ha sido incapaz de materializar en ocasiones claras de gol el dominio territorial, con las contadas excepciones de un gol de Villa en clarísimo fuera de juego y un remate claro a bocajarro de Piqué que aún saliendo muy desviado nos desvió la memoria a todos a aquella noche de mayo del año pasado.
Si había un día para no ganar está claro que era hoy, ya que es un resultado subsanable en la vuelta y que no resta puntos en el campeonato liguero. Además, un 0 a 0 en casa, analizado fríamente, no es un resultado tan malo ya que no has encajado goles en casa lo que supone que sólo con marcar un gol en la vuelta obligas al contrario a marcar siempre un gol más que tú. Y si encima tenemos en cuenta que el Barça ha ganado sus siete partidos como visitante, la confianza es aún mayor.
Sea como fuere el partido del, posiblemente, próximo día 5 en Bilbao será un partido espectacular y entretenido, pero a la vez la primera ocasión en que el equipo flirteará con la eliminación en una competición en esta temporada. Será la gran primera prueba de fuego de la temporada, un todo o nada.
Mientras llega ese momento habrá un Barça-Levante de Liga entre medio el día 2, o no, según se resuelva el enésimo conflicto entre las partes que forman este circo de la Federación, AFE, LFP y Televisiones.
Que mañana tengáis todos mucha suerte con los niños de San Ildefonso.
Feliz Navidad y Feliz año nuevo.
Foto: www.sport.es