Siempre me gustó el cine de Bigas Luna. Algunas cosas de él se me han quedado grabadas en la retina a fuego y han marcado un referente en mi memoria cinematográfica de por vida. Un poco visionario y descubridor de talentos que supo conjugar el erotismo con la calidad, sin caer en la tentación de sobrepasar esa línea que describe el cine zafio e innecesario del que realmente gusta, provocando en el espectador un deseo contenido sin llegar a rebasar las cotas necesarias de excitación.
Me fascinó “Las edades de Lulú”, me quedé boquiabierto con “Jamón, jamón” y “Huevos de oro”, me asombró “La teta y la luna”, he disfrutado con una de las mejores historias de amor como “Son de mar” y adoré a la Juani en “Yo soy la Juani”. También tenemos cagadas como su última “Di Di Hollywood” o “La camarera del titanic”. Aún así aprueba y con muy buena nota y por desgracia perdemos a uno de los grandes. Ahora nos alimentaremos con sitcoms de mierda a base de pseudo actores salidos de teleseries tipo “Al salir de clase”.
67 años y un cáncer de leucemia se han llevado a este barcelonés que sin haber estudiado cine, seguramente sabe mucho más que cualquier mierda que se cree con derecho a vendernos una cosa que ellos llaman películas.
Un abrazo cariñoso desde estas líneas a su familia y a él esté donde esté, que seguramente sea un sitio preferente debido a su calidad.