Quizá el nombre de bigudíes no os sea muy familiar, pero esta es una herramienta espectacular para conseguir diferentes peinados. En algunos países también se les llaman ruleros, rulos o rulos flexibles y desde los tiempos de nuestras abuelas se vienen usando sin parar.
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Los bigudíes son una alternativa a los rizadores y peines eléctricos que producen ondas. Estos no necesitan electricidad y tampoco dañan nuestro cabello por el contacto con las planchas además, no tendremos que preocuparnos por las puntas abiertas.
Tal vez creáis que están pasados de moda, pero en la actualidad muchas mujeres están volviendo a los tratamientos de belleza más naturales y con un toque retro. Por ello, a continuación hablamos acerca de los diferentes tipos de bigudíes que podemos comprar y como usarlos.
¿Qué son los bigudíes para el pelo?
Los bigudíes son pequeñas herramientas de madera, plástico o tela que nos permiten enrollar nuestro cabello y hacer que al secarse tome una forma ondulada. Estos vienen en diferentes tamaños para que tengamos ondas grandes o rizos de onda pequeña.
Existen distintos tipos de bigudíes pelo dependiendo del material y la forma y cada uno está pensado para distintos tipos de peinado.
1. Bigudíes en espiral
Se trata de largas varillas de madera o de plástico con espirales a en todo su recorrido que nos aseguran ondas cortas o rizos que recorren toda la longitud de nuestro cabello.
Los primeros bigudíes fueron los de espiral hechos de madera y su gran popularidad se debe a que los acabados con ellos son muy duraderos.
Sin embargo, estos son los más complicados de usar ya que con facilidad se enredan cuando los estamos soltando.
¿Cómo usar bigudíes de espiral?
Algo que debemos tomar en cuenta con todos los tipos de bigudíes es que si los usamos con el cabello mojado el resultado será más duradero.
Para comenzar, debemos separar el pelo en secciones de un volumen pequeño ya que estos no están diseñados para soportar mucho cabello.
Después debemos prensar el cabello de la punta con una pinza y empezar a enrollar hacia arriba. Tratad de que no te queden mechones fuera de la espiral para que las ondas sean parejas.
Ahora, debemos prensar el cabello en la parte de arriba y repetir el proceso con todos tus mechones.
Tomad una secador y con una mano levantad un bigudí y aplicad calor uniforme para que se seque todo el cabello. Continuaremos secando hasta que toda nuestra melena esté lista y solo en ese momento empezaremos a desenrollar.
Debéis recordar comenzar siempre con el cabello de abajo e ir subiendo porque de hacerlo al revés se nos puede enredar.
También podemos hacernos unos rulos con el cabello seco, enrollando nuestro pelo y aplicándole una capa de laca. Debemos esperar 10 minutos hasta que tome la forma y listo. Esta es una opción rápida, pero no es tan duradera como la anterior de cabello mojado.
2. Bigudíes flexibles
De plástico, son muy flexibles, fáciles de utilizar y limpiar. Su manejo es muy sencillo pues, los bigudíes flexibles se colocan sin pinzas. Por su gran calidad, este tipo de bigudíes son aptos para permanentes.
Cómo utilizar los bigudíes flexibles
Como el pelo no queda tan tenso como con otro tipo de bigudíes, es recomendable usar espuma o spray fijador antes de colocar los bigudíes flexibles.
Colocamos los bigudíes en las puntas del pelo con los mechones humedecidos e iremos girando el pelo entorno al bigudí hasta llegar a la cabeza. Para sujetarlos, solo tenemos que girar los extremos sobre sí mismos.
Después secaremos el pelo al aire libre o con secador. Lo importante es no retirar hasta que el cabello esté completamente seco. Al ser gruesos y no tener agujeros como otros tipos de bigudíes, el proceso de secado será un poco más lento.
3. Bigudíes tradicionales de plástico
Estos son los que nos vienen a la mente siempre que nos hablan de bigudíes. Son rollos de plástico que se fijan muy pegados a la cabeza y que suelen llevar las mujeres de las películas del siglo pasado.
Estos son dos piezas de plástico con agujeros en forma de malla que se inserta una dentro de la otra. El resultado es igual que con los bigudíes tradicionales de plástico, pero mucho más rápido. De hecho no hace falta que usemos el secador si no debemos salir de casa, al menos en un par de horas, mientras se seca nuestro pelo.
Además, podemos hacer otras tareas en casa con ellos puestos ya que se fijan muy bien impidiendo que se desenrollen o se muevan.
En cuanto a las ondas y rizos podemos elegir el tamaño que queramos, desde los más pequeños hasta unas ondas de varios centímetros de ancho. Podemos combinar distintas medidas para crear un peinado lleno de volumen y movimiento.
¿Cómo usar bigudíes de plástico tradicionales?
Al igual que antes, debemos tener el cabello mojado y separado en mechones del volumen que queramos.
Después, con el bigudí abierto, debemos comenzar a enrollar el cabello desde abajo, hacia arriba en el cilindro interior, estos tienen pequeñas puntas para facilitarte el trabajo.
Cuando lo tengamos bien enrollado, tomamos la pieza exterior que tiene una ranura que le permite abrirse y envolver a la otra. Una vez puesta, evitará que se desenrolle nuestro cabello y fijará el rulo a la cabeza.
Ahora, usaremos el secador o simplemente esperaremos un par de horas a que el cabello se seque por sí solo.
Por último, solo debemos abrir la pieza exterior y comenzar a desenrollar girando el cilindro suavemente hacia abajo. Siempre recordad empezar por abajo para evitar enredos.
Para el toque final, peinad el pelo con los dedos, así las puntas se alinearán y conseguiremos un peinado perfecto.
4. Bigudí de velcro
Estos son los más usados actualmente pues nos permiten elegir el ancho de onda que queremos en una tira de cabello, hacer degradados y una infinidad de peinados. Los bigudíes de velcro son rulos adhesivos que cubren nuestro cabello y se pegan sobre si mismos dándole una forma de espiral a nuestro cabello. Gracias a su diámetro podemos lograr ondas muy grandes y con mucho volumen.
Cómo usar los bigudíes de velcro
El primer paso que debemos seguir para lograr rizos con bigudíes de velcro es introducir el pelo en un bigudí del velcro lo bastante largo para cubrir todo el mechón.
A continuación, una vez el pelo esté enrollado debemos usar una pinza de peluquería para asegurarnos de que el mechón no se suelta.
Después, debemos comenzar el secado, el cual es muy rápido porque el material de los bigudíes para rizar el pelo es muy fino.
Por último, solo nos queda quitar la pinza y despegar el velcro con cuidado. El resultado que tendremos son ondas o rizos muy personalizables para que podamos probar peinados nuevos cada vez.
Bigudies, peinados perfectos sin dañar nuestro cabello
Ahora que sabemos cómo usar los bigudíes para cabello solo nos queda elegir si queremos rizos pequeños y muy definidos o si preferimos unas ondas grandes que se muevan con el viento. No importa el peinado que queramos, con los bigudíes podremos probar todos los estilos de ondas que podamos imaginar.
No hay excusa para no probar nuevos peinados con un método tradicional que nos garantiza que no dañará nuestro pelo.
Buen día a tod@s!!
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