Hoy los invitamos a conocer Bilbao desde el bus, como ya hicimos con otras ciudades. Esta vez vamos a hacer un poco de “trampa”, porque entre las fotos se van a filtrar algunas “desde la calle”.
Nos subimos al bus rojo de dos pisos un día de mucho sol para lo que estábamos acostumbrados en Bilbao. El bus estaba algo vacío porque no estábamos en temporada alta. El recorrido por la ciudad dura una hora aproximadamente y tiene 13 paradas en las que uno puede subirse y bajarse las veces que quiera, durante el día.
Como siempre decimos, tomar estos buses es una buena opción para tener una idea general de cómo es la ciudad y qué cosas hay para ver.
En Bilbao, el recorrido comienza frente al Museo Guggenheim, al lado del puesto de información turística. El bus pasa por la plaza Euskadi donde se encuentra la torre Iberdrola, creada por el arquitecto César Pelli.
Mientras vamos camino a la primera parada vemos algunos edificios y detalles como estos:
La primera parada es en la Plaza Federico Moyua o Plaza Elíptica. Allí se pueden ver los accesos al metro construidos con acero inoxidable que se conocen popularmente como “fosteritos”, debido a que el metro de la ciudad fue obra del Norman Foster.
Dejando atrás la plaza, el bus toma por la Gran Vía en la que se observa una zona muy comercial.
La segunda parada es la Plaza Circular en la que se ven edificios representativos de la burguesía de Bilbao. Cruzamos el puente de El Arenal y antes de ingresar en el Arenal, tercera parada, y el Casco Histórico, vemos a nuestra izquierda vemos el edificio del ayuntamiento.
El bus cruza nuevamente otro puente, el de la Merced, pasa unas pocas cuadras por la Bilbao Vieja, y vuelve a meterse en la Ribera, donde es la cuarta parada.
Desde La Ribera cruza el puente del Arenal y allí se encuentra la quinta parada para poder disfrutar de uno de los edificios más emblemáticos como el Teatro Arriaga.
El bus vuelve a tomar por la Plaza Circular y la Gran Vía hasta que se desvía por la calle Urjiko hasta la plaza Bizkaia. Luego, toma otra vez la Gran Vía Don Diego López de Haro, atraviesa un parque y llega hasta la zona del paseo marítimo.
Desde el paseo marítimo cruza el puente Euskalduna y bordea el río hasta llegar, nuevamente al Ayuntamiento y, desde ahí, a la parada 1. Mientras bordea al río tiene las paradas 8, 9, 10, 11 y 12. Muchas personas se bajan en la parada 10, cruzan el puente que ven a sus espaldas y llegan al Museo Guggenheim y a la torre Iberdrola, para desde allí volver caminando a la Plaza Federico Moyúa.
Bilbao es una ciudad que, si te gusta caminar, se puede recorrer a pie sin problemas. Por lo menos la parte que recorre el bus.
Una parada que les aconsejamos es la del casco viejo, a donde el bus no ingresa y por donde es un placer caminar y mirar todos los detalles.
Los invitamos a leer Bilbao en 7 impresiones y conocer un poco más de cerca esta ciudad que nos alojó por más de 20 días.
Pueden obtener más información sobre el bus turístico en la web oficial.
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