Mi desaparición (como para variar) tiene una única culpable y se llama “semiología”, una materia de mierda, que es la única que me está dando dolor de cabeza, por la fucking culpa del CBC. Ojo, hay gente que tarda más de un año en hacer el cbc, y yo recién habiendo ingresado este año a la facultad estoy a esta altura con una materia, debería estar contenta, pero no, porque si no apruebo me voy a tirar debajo de un tren. Sí, así de sencillo y simple es. Así que no importa si son musulmanes, cristianos, budistas, ateos, lo único que les pido es que recen/prendan una vela/hagan vudú o algo para que aprueben por Dior. Sé que no soy una buena persona, pero por lo menos una ayudita del barba necesito así estoy en paz con mi vida académica.
Para el colmo ya pasaron las semanas de la moda y siempre llego última a estas cosas. No me quejo, ni me molesta, todo lo contrario, siempre busco traer novedades desde otra perspectiva, y últimamente tengo demasiado para hablar sobre la alta costura, pero lo voy a dejar para otra ocasión, en unos días, o semanitas tal vez, iré viendo. Lo que si, hoy vengo con una propuesta diferente o tal vez no tanto: hice una recopilación de fotos que encontré por la web de Harper’s Bazaar, chusmeando sobre estos últimos días en Europa y un poco en NY, acerca de la presentación de los futuros ítems principales, que tienen que ver con la moda. Y llegué a una linda conclusión: la moda es tan linda, que no me atraen los pedazos de tela, sino que me atrae la historia de este mundo. La historia de cada mujer que van a ver en las fotos de abajo. Historia de mujeres, hombres, que tal vez pasaron por hambre, o por peleas familiares, que tuvieron/tienen problemas con drogas, que tienen más dinero del que van a usar en toda su vida, personas que son mundialmente famosas por usar cosas que tal vez ni le gusten. Personas que apenas saben hablar, o tal vez no saben lo que es un polimonio. No lo sé. Ustedes tampoco. Hay mucha historia, demasiado. No es solo un vestido, una pollera, una remera, zapatos, sino el cuerpo que lo viste, el cuerpo que lo modela, un estereotipo que para la mayoría es “ideal”, ¿pero qué es lo “ideal”? ¿Qué es lo “perfecto”? ¿Por qué todo el mundo busca ser flaco/a? ¿Por qué nadie buscar sentirse cómodo con su cuerpo y mandar a la mierda todo?
Hay mucha historia en estas fotos. Demasiada. Ojalá pudiera saber los oscuros secretos o la realidad pura de cada uno de los intérpretes de estos íconos visuales que les voy a pasar a mostrar, personalmente me llamaron la atención porque están usando cosas que yo nunca usaría, o cosas que amaría usar, o porque son personajes emblemáticos, ya sea famosos por modelaje, por televisión, por cine, por arte, etc, pero sobre todo son personajes con poder. Uno tan grande, que te transforma y te hace desear estar ahí, mirar a todos y decir “bitch please, I’m…” ¿Pero saben lo qué creo? Que esa transformación la tenemos que hacer posible. Ya sea si deseamos estudiar medicina, contaduría, un profesorado, o si no quieren estudiar y quieren trabajar toda la vida, creo que lo importante es plantarse y decir “Bitch please, I’m Natalia Beroiz and i’m a fucking genius doing that”: lo mejor es plantarnos y levantarnos todos los días con la mente y la frente altas, para recordarnos que debemos mejorarnos todo el tiempo un poco más y no dejar ir los sueños y las metas.
Que nada nos detenga, hacer todo lo posible por más que cueste, por más que nos pongan millones de trabas, por más que suframos. Sé que suena cliché esto, pero no sé. Tengo la necesidad de recordármelo día a día y tener en mente que no importa si tardo décadas en cumplir mis sueños, lo que sí sé es que los voy a cumplir. Y nada me va a detener y los personajes de estas fotos, son algunos de los que me motivan. No porque sean ejemplares, u honoríficos, sino porque ellos están, donde un día voy a estar yo, marcando MI tendencia y haciendo las cosas con mis reglas y mis gustos. Porque al fin y al cabo nosotros hacemos la moda. Nosotros marcamos tendencia. Nosotros somos la próxima temporada.