Black friday

Hace semanas que nos llevan bombardeando con las grandes ofertas y descuentos del famoso viernes negro, víspera del Día de Acción de Gracias americano. Y como cuando algo se convierte en tendencia en el país de Trump, nosotros vamos detrás. Pero es importante saber de dónde viene la celebración del famoso viernes, o si es tan negro; y lo que nos dice la historia es que sí. Este último viernes de Noviembre se vendían los esclavos (negros) y como ya había acabado la temporada del trabajo de jornalero, pues eran mucho más baratos. Esas practicas que se supone acabaron con Linconl, aunque bien es cierto que no faltan días en el telediario en el que no se evidencien las diferencias de haber nacido en un país o en otro; en una familia o en otra, mujer o varón...eso es precisamente lo que estamos "celebrando" con tanta oferta estos días. Seguimos siendo esclavos de un consumismo arraigado y potente que nos transforma con un signo de %, de descuento. Sabemos que quizá las zapatillas que claro, necesita mi niño para el cole y aprovecho que están más baratas, las ha fabricado posiblemente otro niño, que si ya está explotado por una multinacional...estos días ni me imagino lo que habrá cobrado. Podemos seguir sin cargo de conciencia (cada uno llega a fin de mes, al black friday, como puede), pero podemos, al menos no ser ignorantes con lo que nos rodea. Ya que, al lado de la puerta de entrada de todos los comercios, estos días de mucho barullo siempre hay gente pidiendo para cáritas, banco de alimentos o cualquier otra organización. Al menos ellos recogen las migajas del consumismo, y a aquellos "esclavos, negros" que cada año se venden en nuestra sociedad. Después del viernes, como ya sabemos, viene el día de acción de gracias. Las madres de aquellos las darían si no son vendidos su hijos, maridos, ellas mismas...también a nosotros nos toca: por los chollos o porque realmente apreciamos lo que somos y tenemos.

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