Siglo XVIII. Nos trasladamos a la isla de Nueva Providencia, considerada por las autoridades imperiales españolas y británicas como poco más que una cueva de piratas, hogar de ilustres personajes, y de ávidos bandidos sedientos de riquezas y poder.
Nuestro viaje comienza 20 años antes de la historia que narra la novela "La isla del tesoro" de Robert Louis Stevenson, y surcaremos junto al Capitán Flint y a su inseparable Long John Silver los mares en el inicio de la aventura que marcó un hito en la literatura universal.
La historia comienza siguiendo las desventuras de un pícaro John Silver (Luke Arnold) y las hazañas de un temido capitán Flint (Toby Stephens), que junto con una miríada de personajes, algunos históricos y otros literarios, como los propios Flint y Silver, pasando por Charles Vane, Anne Bonny, Jack Rackham o el mismísimo Barbanegra, cuyas historias se entrecruzan y que nos llevarán a caminar sobre la cubierta de míticos barcos como el Walrus o el Ranger.
Una producción con tintes épicos, cuyos romances y sorpresas hacen que los capítulos se nos hagan cortos y tremendamente adictivos.