![Blackberry Smoke - Barcelona 18-10-15 - Sala Bikini Blackberry Smoke - Barcelona 18-10-15 - Sala Bikini](http://m1.paperblog.com/i/342/3425735/blackberry-smoke-barcelona-18-10-15-sala-biki-L-9J_o7z.jpeg)
Rockeros aburguesados muchos de nosotros, llegar 5 minutos antes del inicio del show y encontrarte con una sala llena hasta la bandera, lo que garantiza una mala visión del espectáculo, genera mal humor y resentimiento. Uno se pregunta cómo es posible que una banda como Blackberry Smoke, que, al menos que yo sepa, no han gozado de una especial promoción ni se le conocen concesiones al gran público, arrastre a tanto público. Especialmente en Barcelona. Y mezquino que es uno, radiografía a todo el que le rodea y empieza a señalar mentalmente a todo aquel que considera indigno de figurar en un show de RN'R. Tú, tú, tú, tú y tú, dónde estabais cuando Dirty York pincharon en su última visita a la ciudad ... Seguro que me entendeis ... Afortunadamente, una demoledora tripleta incial compuesta por "Six Ways to Sunday", "Let Me Help You (Find the Door)" y "Testify" cura todos los males. Y si tras la calma de "Pretty Little Lie" -muy celebrada por el sector más hillbilly del respetable-, se desata una tempestad formada por "Fire in the Hole", "Rock and Roll Again" y "Good One Comin' One", uno sólo puede dar gracias por la ignota suma de factores que provocan que una banda de 100% southern classic rock tenga semejante poder convocatoria en la Ciudad Condal de 2015. Rival Sons lograron la misma proeza -sold out en una sala grande como Bikini- meses atrás. ¿Estarán cambiando los tiempos -a mejor-? La velada prosiguió con una jammie "Sleeping Dogs" salpimentada con fragmentos de "Your Time is Gonna Come" de Led Zep y "Midnight Rider" de Allman Bros., con la favorita de un servidor, "Woman in the Moon" y la robustez de "Shakin' Hands with the Holy Ghost". Y así hasta completar un total de 21 temas en aproximadamente 1.45h, destacando el momento "expediente X" vivido con "Ain't Got the Blues" -con una parte importante del respetable, especialmente las féminas, cantando a capela una estrofa entera de uno de los temas más oscuros de su discografía- y la recta final, puro músculo rockero -con el permiso del receso country de "Too High"- con una sucesión de himnos confederados de la talla de "Shake Your Magnolia", "Payback's Bitch", "Restless" o "Ain't Much Left of Me". Cierto que Blackberry Smoke no se trata de una banda con una actitud escénica incendiaria. Mientras que Charlie Starr da la cara y ejerce a la perfección de maestro de ceremonias, sus compañeros prefieren mantenerse en un segundo -o tercero o cuarto- plano y centrarse en tejer esa maravillosa telaraña musical. Personalmente, el sudar la camiseta, el interactuar con la audiencia, el dejarse la vida encima de las tablas, es un plus; pero si a cambio de prescindir de esos factores, obtengo una compensación sónica como la exhibida -y, globalmente, un show claramente mejor al vivido en Razz 3 en 2009-, acepto el trato.