Una semana más y cargadita de fotos que vengo. El otro día me entraron unas ganas locas de retratar a propósito a mi hija. El día estaba un poco nublado y ella tenía muchas ganas de jugar así que se complicó mi idea inicial. Pero al final quedaron unas fotos decentes. Yo que soy su madre no tengo una opinión imparcial, no puedo evitarlo. Así que aquí las traigo para que las valoréis vosotros mismos. He elegido para la mayoría el blanco y negro porque normalmente soy una apasionada del color y quería variar. Además el día se prestaba a ello. Sus rasgos morenos e intensos también casan a la perfección con este tipo de fotografía. Y así pasamos la tarde. Ella jugando como si nada, en su entorno, natural. Yo disfrutando de la cámara y aprendiendo un poquito más para poder ofrecer un buen trabajo. Si tú también quieres tener un bonito recuerdo de alguien especial no dudes en contactar con Sonríe Buttercup! www.sonriebuttercup.com[email protected]