Blas Ruiz y los planes para la conquista de Asia

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l gobernador de Manila en 1593, Luis Pérez Das Mariñas, fue receptor de una carta enviada desde el subcontinente asiático, una carta del rey Jemer que pedía auxilio frente a la invasión siamesa que se cernía sobre su reino, fue enviada entonces a Jemer una embajada capitaneada por Blas Ruiz.

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Primera Expedición en Tierra Camboyanas (1593-1596)

Por orden del gobernador partió hacia Chordemuco capital del Imperio jemer, donde conoció a Diego Belloso, portugués de Amarante de trayectoria desconocida. La llegada de la embajada española coincidió con la toma de la capital jemer por Ayyutthaya, y la huida de la familia real a las tierras aliadas de Lan Xang^[1].

Blas Ruiz y Diego Belloso convencidos de su propia cruzada usaron como intermediarios a los dominicos para hablar con el gobernador de Manila, y convencerle de la expedición que pretendían realizar en el continente asiático. Las ansias de expandir las fronteras y de extender la fe cristiana, hicieron que el gobernador diera luz verde a tal proyecto.  El resultado de este proyecto fue la primera presencia militar castellana documentada en tierras Camboyanas en 1595.

Debido al vacío de poder que el Rey de Jemer había dejado tras su huida al país aliado, una parte del pueblo de Jemer se rebeló contra la retaguardia del ejército invasor. Tras esta victoria la facción mandarín que habitaba en Jemer tomó el control del gobierno de país, por lo que el líder de los mandarines Khmer Nak Caron, se proclamó soberano legítimo, viéndose favorecido por la indiferencia del pueblo.

Ruiz envió una embajada a Sithor, la nueva capital de Jemer, con el objetivo de visitar al nuevo rey y saber de las intenciones de éste, así como para saber de la expedición del otro junco que estaba anclado en el puerto de Chordemuco. Esta embajada fue recibida de buen grado por el rey, el cual se ofreció en todo momento a ayudar a los españoles.

Todo parecía ser favorable para Ruiz, pero no es lo que pensaban sus compañeros, pues entre la tripulación pesaba la idea en todo momento que lo que realmente el nuevo rey usurpador pretendía era reunir a todos los expedicionarios en una sala y matarlos cuando tuviera ocasión, estas sospechas hacia el rey mandarín, obligado a unirse con Belloso, que estaba anclado en el puerto de Chordemuco y trazar un plan conjunto.

La situación empeoró con la presencia de seis barcos mercantes chinos en el puerto de Chordemuco, pues la relación entre chinos y españoles no parecía ser muy amigable. Según Ruiz los españoles recibieron menosprecios e insultos por parte de ellos.  Debido a que los chinos contaban con la protección del nuevo rey y que la misión de la expedición era ganar el favor de éste, siendo Ruiz consciente de que no podían hacer nada ante estos insultos, por lo que acudieron al rey en busca de una solución. Sin embargo, éste hizo caso omiso a las peticiones de los españoles, por lo que viéndose favorecidos por el rey, los chinos cada vez se envalentonaban más en contra de los españoles, hasta que ya estos hartos de los abusos decidieron tomar las armas en contra de los chinos, siendo una masacre para los comerciantes.

Tras este acontecimiento, Ruiz y Belloso dispusieron una embajada de cincuenta españoles, algunos filipinos y japoneses con el objetivo de ir a Sithor para pedir disculpas al rey por tales actos. Khmer Nak Caron, no les concedió audiencia, exigiéndoles que devolvieran los barcos y los bienes robados a los chinos. Los españoles amenazados por el rey vieron peligrar su situación en el territorio, por lo que decidieron poner fin a los que ellos consideraban como un rey usurpador.

El plan para acabar con el rey fue salir a media noche y provocar un incendio en las dependencias del rey.  Animados por el escaso número de la compañía española, los jemeres salieron en su búsqueda rodeando al invasor en la plaza. Empezó así una lluvia de flechas sobre los españoles, hiriendo entre ellos a Belloso que recibió una de ellas en la rodilla. Khmer Nak Caron de igual manera murió en aquel duro enfrentamiento, por ser alcanzado por una bala enemiga que lo dejo gravemente herido. Blas Ruiz y Belloso, aprovechando la confusión de los jemeres decidieron retirarse por tierra, siendo perseguidos por los naturales. Bajando por la ribera del Meckong, la expedición llegó finalmente a Chordemuco, donde estaban sus barcos y el resto de sus hombres, pero antes de llegar a estos, un último contingente de jemeres les cortó el paso una vez más sin éxito, pues el fuego de artillería disparado desde los barcos cubrió la huida de los españoles. Marchándose de Chordemuco, Belloso y Ruiz no dieron por perdido el plan de restituir al legítimo rey de Jemer. De este modo, los españoles desembarcarían en el golfo de tonkin poniendo rumbo a la búsqueda del legitimo sucesor.

Una vez llegados a la Lang Xang, los castillas recibieron una noticia que de nuevo haría que la situación cambiara para el portugués y el castellano, supieron que el Rey Satha I de Jemer, al cual andaban buscando para restaurar su corona, había fallecido. También junto con él sus dos hijos mayores habían perecido, quedando solo de la familia real un hijo menor, de nombre Paramaraja III.

La restauración de la monarquía jemer no supuso la paz inmediata en las tierras de Jemer, pues había provincias que no lo aceptaban como el legítimo heredero. Un ejemplo de estas provincias es la de Tonlé, la cual se describe que fue “arrasada”. Fue en esta campaña de recuperación de poder, donde Belloso y Ruiz se hicieron con la confianza del rey llegando a ser nombrados caudillos de la guerra. Con todos estos favores que los españoles concedieron al rey, se les concedió el gobierno de dos provincias, las dos más grandes de Jemer, dándose a conocer en todo el reino con el título de Chofas.

Autor: José Carlos Vera Callejón para revistadehistoria.es

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Bibliografía:

[1] Laos según las fuentes españolas.

• De San Antonio, Gabriel, Breve y verdadera relación de los sucesos del reyno de Camboya, https://books.google.es/books?id=op1fEduP1cC&hl=es&num=13.
• Fernández Duro, Cesáreo, Españoles en Camboya y Siam corriendo en el siglo XVI, Boletín de la Sociedad Geográfica de Madrid, año 1893, tomo xxxv.
• Fernández Duro, Cesáreo, Como han ido civilizándose los japoneses, LaEspaña moderna, Madrid, 1894.
• Morga, Antonio, Sucesos de las islas Filipinas, Méjico, 1609. https://archive.org/details/sucesosdelasisla00morg
• Fernández de Navarrete, Martin, “Relación y sumario de lo que ha sucedido y se ha proveído y ordenado en el Gobierno de las islas Filipinas desde que entró en él D. Luis Pérez das Marinas hasta Jimio 1594. (T. xvm, números 53 y 54.)”

Relación y descripción de los reinos de Champa y Siam, y de otros sus comarcanos de la India Oriental, muy circunstanciada, hecha en Manila por Diego Belloso, Blas Ruiz de Fernán González, Gregorio de Vargas Machuca, Francisco de Sagrego, Diego de Chaves Cañizares y Pantaleón Carnero. Año 1595. (T. xvm, núm. 56.), Colección Navarrete.

• Acerca de si conviene o no que haya fundición de artillería en Filipinas. AGI. Filip. 36N.40
• Carta de Paramaraja III a Antonio Morga, Archivo Museo Naval (en adelante AMN), deposito hidrográfico. Col Navarrete XVIII. 36
• Carta de Blas Ruiz a Antonio Morga. AMN, deposito hidrográfico. Col 106 Navarrete XVIII. 42
• Peticiones de Miguel Jaque de los Ríos de compañía, encomienda, 11 de febrero de 1621, Archivo General de Indias (en adelante AGI), sección Audiencia de Filipinas, 38, N.63.
• Méritos: Blas Ruiz de Fernan Gonzlez y otro: Filipinas, 17 de marzo de 1634, AGI, sección Patronato Real, 53, R.26.
• Asuntos de guerra, Francisco Tello al Felipe II, 1599, AGI,Sección Filipinas, Leg.6.
• Carta de L.P. Das Mariñas sobre Camboya y Japón, 28 de junio de 1597, AGI, sección Audiencia de Filipinas, 18B, R. 7, N.71.
• Cartas de L.P Das Mariñas comprendidas entre 1595 y 1599, AGI, sección Audiencia de Filipinas.
• Conquista del Reino de Siam, 30 de junio de 1600, AGI, sección Patronato Real 25, R.61.
• Documento 5813,1599, AGI en sección Filipinas, Leg .8.
• Luis Pérez Das Mariñas: Guerra de Siam con Camboya, 1594, sección Patronato Real, 263, N.1, R.6.
• Relación del gobierno de Luis Pérez das Mariañas, 1594, AGI, sección Patronato Real, 25, R57.
• Carta del Dominico Diego Aduarte sobre extenderse a reino de tierra firme, 26 junio 1598, AGI, sección Audiencia de Filipinas, 84, N.81.
• Carta de Tello sobre naturales, Japón, Camboya, Siam, 30 mayo de 1597, AGI, Sección Audiencia de Filipinas, 18B, R.7, N.58.

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