Revista Cine

Bob Fosse sigue dando guerra

Publicado el 25 abril 2019 por Josep2010

Bob Fosse sigue dando guerra
Primero, lo simpático y curioso:
¿No les ha ocurrido nunca sentir la comezón de recordar dónde oyeron antes una música?
¿Y cuándo estás segurísimo que viene de una película y no te acuerdas de cuál?
Desde hace unos días hay una especie de invasión sonora que aparece inopinadamente estés en casa de uno u otro y se me llevaban los demonios porque yo sabía que había escuchado el sonido ése con anterioridad, pero no recordaba dónde.
Adelantemos: no voy a presentar el origen porque no quiero hacer publicidad gratis, pero sí voy a solventar para todos y de una vez por todas, el origen cinematográfico del comezón:

Sweet Charity (1969), primer largometraje de Bob Fosse, todavía no comentado en este sitio a pesar de que quien suscribe es admirador del celebrado coreógrafo y director. [ Hemos comentado Cabaret (1972), Lenny (1974) y All That Jazz (1979) ]
La música, de Cy Coleman. La coreografía, de Fosse, claro.
Bob Fosse sigue dando guerra
Después lo otro, más complicado:
Los que han visto All That Jazz saben que se trata de una autobiografía filmada por Fosse en la que expone con poca vergüenza sus virtudes y defectos y que en su vida tuvo importancia su relación con las mujeres y especialmente con la célebre bailarina Gwen Verdon, su tercera y última esposa con la que realizó muy buenos trabajos para el teatro y el cine.
Veamos (recordemos, porque me parece que ya apareció antes por aquí, pero no me importa nada repetirme) un ejemplo:
"Whos's Got The Pain" (Malditos Yanquis, 1958)

Estamos en el siglo XXI y hace casi 32 años que falleció Bob Fosse; Gwen le sobrevivió hasta el año 2000. Y ahora, en 2019, hay un movimiento de defensa de los derechos de las mujeres, denominado MeToo, que por una parte ha conseguido desenmascarar actitudes abusivas y en ocasiones delictuosas y por otra emponzoñar con relatos inventados honorabilidades de gentes con una popularidad contrastada, nada efímera, fruto de un trabajo duro de años, como es el caso de Woody Allen, por ejemplo, que sigue vivo y protestando por las infamias que sobre él van vertiendo después de haber salido indemne de acusaciones en corte judicial.
Algún imberbe indocumentado ha buscado a quién meterle mano aprovechando la corriente proteccionista del MeToo y ha caído en la cuenta que Bob Fosse era un mujeriego impenitente (cosa que sabía todo el mundo) y además un coreógrafo muy exigente, un perfeccionista quisquilloso, y se le ha ocurrido hacer un docudrama televisivo que al parecer está ofreciendo FX estos días reclamando reconocimiento para Gwen Verdon por su colaboración con Fosse y dejándole a él hecho un guiñapo.
No he visto el documental, pero sí le he dado un vistazo al artículo del New York Times del 29 de marzo de 2019 que toma como referencia el citado docudrama presentado por la cadena FX titulado "Fose/Verdon" en el que prácticamente se demoniza la figura del legendario coreógrafo y director de cine siguiendo las últimas tendencias impuestas por el movimiento supuestamente feminista MeToo. Y digo lo de supuestamente porque uno no se siente en la obligación de ser políticamente correcto y sin ser adicto a la iconoclasia ya empieza a estar un poco harto de tantas sandeces hediondas que verdaderos memos expresan públicamente e incluso se atreven a poner negro sobre blanco al amparo de unas pretensiones que sin dejar de ser justas en modo alguno pueden cobijar ataques personales carentes de la más mínima profundidad, trabajo y estudio.
El artículo del N.Y.T. es comentado por el coreógrafo Bob Boross que lo desmenuza con sentido crítico y documental en un vídeo que puede fácilmente seguirse al proveer subtítulos en castellano :

Y de propina, veamos de nuevo a Bob Boross (subtítulos en castellano) analizar la semana pasada como profesional que es la coreografía y antecedentes coreográficos del número ejecutado por Gwen y Bob que ya hemos visto:

Gracias, Bob Boross, por aclarar conceptos.
Siempre es agradable repasar el arte de Bob Fosse.

Volver a la Portada de Logo Paperblog

Revista