Revista Cultura y Ocio
Bodas de Plata de una Europa Unida sin Fronteras Internas
Publicado el 02 abril 2018 por Rene Aga @RAVAZECelebramos 25 años de Mercado Común Europeo que existe desde la entrada en vigor del Tratado de Maastricht que fue firmado en 1992 y por el que se creó la Unión Europea. Con el Mercado Único la libre circulación de mercancías, servicios, personas y capitales se hizo realidad. El Tratado es también llamado la Constitución para Europa. Es la culminación de un proceso que empezó con la Unión del Carbón y del Acero gestada a principios los años 1950, seguida por la Comunidad Económica Europea (1957-58). Anteriormente en 1944 todavía antes de finalizar la II Guerra Mundial, Bélgica, Luxemburgo y los Países Bajos ya habían establecido el Benelux desde el Reino Unido, primero como unión aduanera que después, en 1958, se convertía en unión económica.
En el preámbulo (Ref.1) del Tratado 25 Jefes de Estado afirman que la UE se inspira “en la herencia cultural, religiosa y humanista de Europa, a partir de la cual se han desarrollado los valores universales de los derechos inviolables e inalienables de la persona humana, la democracia, la igualdad, la libertad y el Estado de Derecho”, y porque están “convencidos de que Europa, ahora reunida tras dolorosas experiencias, se propone avanzar por la senda de la civilización, el progreso y la prosperidad por el bien de todos sus habitantes, sin olvidar a los más débiles y desfavorecidos; de que quiere seguir siendo un continente abierto a la cultura, al saber y al progreso social; que desea ahondar en el carácter democrático y transparente de su vida pública y obrar en pro de la paz, la justicia y la solidaridad en el mundo” – Y “convencidos de que los pueblos de Europa, sin dejar de sentirse orgullosos de su identidad y de su historia nacional, están decididos a superar sus antiguas divisiones y, cada vez más estrechamente unidos, a forjar un destino común.”
Eran 25 Jefes de Estado de Alemania, Austria, Bélgica, Chequia, Chipre, Dinamarca, Eslovaquia, Eslovenia, España, Estonia, Finlandia, Francia, Grecia, Hungría, Irlanda, Italia, Letonia, Lituania, Luxemburgo, Malta, Países Bajos, Polonia, Portugal, Reino Unido, y Suecia.
El Título Primero define la Unión: el por qué y para qué se creó, sus valores, objetivos, libertades fundamentales y no discriminación, las relaciones entre la Unión y los Estados miembros, el derecho, la personalidad jurídica y los símbolos (la bandera con un círculo de estrellas doradas sobre un fondo azul; el himno, la “Oda a la Alegría” de la Novena Sinfonía de Ludwig von Beethoven; la divisa “Unidad en la Diversidad”) y su moneda única: el euro (que no todos los miembros han adoptado). Y se fijó el 9 de mayo como Día de Europa.
No solo los estados tienen su voz en la UE. El Parlamento, el Consejo y la Comisión Europea, están asistidos por órganos consultivos como el Comité de las Regiones y el Comité Económico y Social (con representantes de las organizaciones de empresarios, trabajadores y sectores de la sociedad civil)
Hay disposiciones particulares sobre la seguridad y la defensa por las que la UE tiene medios civiles, y militares (se crea la Agencia Europea de Defensa) en el marco de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN). Destaca una clausula de solidaridad que especifica que “la Unión y los Estados miembros actuarán conjuntamente con espíritu de solidaridad si un Estado miembro es objeto de un ataque terrorista o víctima de una catástrofe natural o de origen humano”.
Sobre la vida democrática en la UE el Tratado dice que “Las decisiones serán tomadas de la forma más abierta y próxima posible a los ciudadanos”. Y “los partidos políticos de dimensión europea contribuirán a formar la conciencia política europea y a expresar la voluntad de los ciudadanos de la Unión.” Hay un artículo sobre el “principio de democracia participativa” por el que un grupo de al menos un millón de ciudadanos de la UE, nacionales de un número significativo de los Estados miembros puede invitar a la Comisión a que presente una propuesta jurídica.
El 25 aniversario debe servir para dar nuevas fuerzas a la divisa europea de “Unidad en la diversidad”. Para trabajar por una Europa abierta al mundo dando un ejemplo de democracia. Una democracia en la que las mayorías no subordinan a las minorías (el Brexit no es precisamente un buen ejemplo de democracia real). Una Europa verdaderamente democrática donde "una mayoría sabia de alguna manera se debería acercar a la minoría, si es posible, en lugar de utilizar su posición mayoritaria simplemente para hacer caso omiso de la otra. La democracia sólo es sostenible si la gente puede estar de acuerdo en seguir viviendo juntos, y esto requiere que las mayorías, y los gobiernos que las representan, estén preparadas para ejercer una medida de auto-restricción, y no siempre utilizan el procedimiento de mayoría para capturar todo para sí mismos y su propio punto de vista" (ver ref. 2)
Una Europa fiel al espíritu de sus “padres”, líderes visionarios que inspiraron la creación de la Unión Europea en la que vivimos hoy. “Desde miembros de la resistencia hasta abogados, los padres fundadores eran un grupo heterogéneo de personas que compartían los mismos ideales: una Europa pacífica, próspera y unida” (Ref.3). Eran por orden alfabético: Konrad Adenauer (Alemania), Joseph Bech (Luxemburgo), Johan Beyen (Países Bajos), Winston Churchill (Reino Unido), Alcide de Gasperi (Italia), Walter Hallstein (Alemania), Sicco Mansholt (Países Bajos), Jean Monnet (Francia), Robert Schuman (Francia), Paul-Henri Spaak (Bélgica), y Altiero Spinelli (Italia). (Hacer clic en los nombres para más información)
Es aconsejable volver a escuchar hasta el final el discurso del gran estadista británico Winston Churchill a los estudiantes de la Universidad de Zürich en 1946, sobre la creación de una Europa unida para evitar que surjan de nuevo las miserias de dos guerras mundiales, en una tercera que produciría efectos mucho más desastrosos que Hiroshima. Los valores no se construyen separando la gente, las regiones y las naciones. "Let Europe arise!" (Que surja Europa!), termina Churchill su discurso. Que nuestros líderes se pongan a la altura de Churchill.
Referencias:
1. “Tratado por el que se establece una Constitución para Europa”, Ministerios de Asuntos Exteriores y de Cooperación, del Interior, y de la Presidencia, Imprenta del BOE. Año 2004
2. "Introducing Democracy" editado por la UNESCO, escrito por el inglés David Beetham, Profesor a la Universidad de Leeds, y el estadounidense Kevin Boyle, Profesor a la North Western University de Illinois
3. “Breve Historia de la Unión Europea”, Página web de la Unión Europea
4. “Cómo funciona la Unión Europea – Comprender las políticas de la Unión Europea – Guía del ciudadano sobre las instituciones de la UE”, Comisión Europea – Dirección General de Comunicación, Bruselas, 2013.