Revista Arquitectura
Las bodegas subterráneas era algo que antes sólo podíamos encontrar en las casas de los más adinerados, aunque poco a poco es una moda que se ha ido extendiendo, y que hoy en día, muchas personas tienen en su casa, permitiendo conservar el vinoen buenas condiciones.
Antes, la opción para las bodegas subterráneas, era un garaje, un subterráneo, o un espacio especial para estos fines. Actualmente muchas personas, optan por contar con ella debajo del suelo donde las condiciones también son buenas, y además con las actuales posibilidades de construcción es una idea más que original. Eso es lo que nos ofrece Spiral Cellars, una bodega en el sub-suelo de la casa, en forma de espiral de entre 1 y 3 metros de profundidad (con una capacidad máxima para 1800 botellas), con paredes acondicionadas, con estantes donde colocar botellas, sistema de refrigeración, y que es recorrido por una escalera de caracol. Una genial idea para los amantes del vino, que podrán instalar en cualquier vivienda unifamiliar.