¡Hola, amigos! ¿Qué tal ha ido el mes de agosto? Esperamos que todos lo hayáis pasado plácidamente, con vacaciones o sin ellas... Nosotras hemos tenido un poco de todo; días de asueto, de trabajo, viajes realizados, viajes frustrados... Pero el balance es positivo; ha sido un buen mes. Y aquí estamos de vuelta, inmersas en pleno septiembre, ese mes en el que, por lo visto, también comienza el otoño climático. Sin embargo, nos resistimos a ello; por aquí es puro verano, y lo seguirá siendo mucho más tiempo, así que, nos cuesta mucho pensar en calabazas, tonos tierra o prendas de abrigo... Ese querer correr tanto con el tiempo hace que éste pase más deprisa aún de lo que ya de por sí vuela... Nosotras vamos a ir a nuestro ritmo y éste, aún está mecido por las olas del mar, por el ligero color tostado de nuestra piel, por esas sandalias que serán la última prenda veraniega que nos quitemos, allá por noviembre, y la decoración natural y refrescante que aportan a nuestros hogares las caracolas, las conchas y otros bichitos marinos...