Fundado en 1876, Bodie es un auténtico pueblo fantasma de Estados Unidos. Se fundó gracias a la minería y a la fiebre del oro.
En 1880 se descubrió oro en las cercanías de la ciudad, lo que atrajo a miles de personas. En 1880 Bodie contaba con una población de casi 10.000 habitantes, era el pleno apogeo de la población. En su momento de mayor esplendor 65 salones se alineaban en la calle principal de la ciudad, e incluso había un barrio chino con varios cientos de residentes chinos y algunos antros nada recomendables. Contaba con dos bancos, una banda de música, ferrocarril, varios periódicos, y una cárcel.
La disminución de la producción minera resultó fatal para Bodie, y aunque se redujo su población en gran medida, Bodie conservaba población permanente en el siglo XX. Incluso después de un incendio que devastó gran parte de la zona comercial del centro en 1932.
Bodie está ahora despoblado. Es un pueblo fantasma. La ciudad fue declarada Monumento Histórico Nacional en 1961, y en 1962 se convirtió en Bodie State Historic Park .
Hoy en día, Bodie se conserva en un estado de lo que ellos llaman decadencia detenida. Sólo una pequeña parte de la ciudad ha sobrevivido al paso del tiempo.
Los visitantes pueden caminar por las calles desiertas de la ciudad y visitar el interior de muchos edificios que permanecen como estaban e incluso algunos almacenes están surtidos con productos en las estanterías.
Bodie está abierto todo el año, pero no es recomendable visitarlo en invierno debido a las fuertes nevadas, por lo que el momento más cómodo para visitarlo es durante los meses de verano.
Bodie es el autentico pueblo del Oeste americano que tantas veces hemos visto en películas, pero en este caso, es real. Recibe todos los años 200.000 visitantes, a pesar de estar situado al final de un camino bastante intransitable de 13 millas que parte de la interestatal 395.
Iglesia de Bodie en la actualidad.
Iglesia de Bodie en 1889