Cada día me combezco mas, que rodearse de un buen ambiente de trabajo, de un espacio calmado y una decoración, hacen que el trabajo deje de ser trabajo, para disfrutarlo con entusiasmo, con creatividad y donde cada espacio, rincón y detalle, se encarguen de envolver una atmósfera idílica. Un estudio boho, puede ser la clave en cuanto color, creatividad y energía, ya que suelen trasmitir esa fuerza y creatividad donde contrastan materiales, colores y épocas.
Hoy nos sumergimos en este espacio creativo, étnico e industrial que explota de color, estampados y detalles, para no dejarnos indiferentes.
Un lugar donde podríamos ver el agobio, el desorden y la mezcla, que para muchos podría significar de todo …. menos tranquilidad y buen estar.
Rodéate de elementos que trasmitan sensaciones positivas, mensajes, color y piezas echas a mano, para desvirtualizar lo industrial. Que tu espacio de trabajo sea armónico y cálido, para sentirte cómodo.
Para un diseñador textil, como lo es la propietaria de este estudio, es lógico que el espacio este plagado de color, de muestras, de vivencias y recuerdos, que ayuden a plasmar en cada hilada o color, el diseño de épocas y tendencias que se transforman y se reinventan en un espacio boho como este.
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