La ciudad italiana de Bolonia crecía, aunque sin contar con grandes espacios, motivo por el que sus responsables decidieron recurrir al desarrollo de dos ideas:-. el crecimiento en altura: aspecto este que cobró gran importancia en esta ciudad, capital de la Emilia Romaña, y bastará ilustrarlo recordando el dato de que llegó a contar con más de 100 torres, a cual más elevada, durante el medievo.
Sin embargo, la gran mayoría no habrían de durar hasta hoy, dadas las inadecuadas características del suelo y la cada vez menor necesidad de defenderse de las demás facciones.
La torre Garisenday la torre Asinelli son las más famosas, que aún hoy continúan en pie. La primera tiene un grado de inclinación con respecto a la vertical de 3,2 metros (superior a la de Pisa); el grado de inclinación de la segunda es de 1,3 metros.
La torre Asinelli, la más alta, tiene una altura de 97,6 metros.
Por su parte y actualmente, la torre Garisenda mide 48 metros. Es famosa por haber sido citada varias veces por Dante Alighieri.
-. y a través del recurso de los soportales, aspecto del que surgieron pórticos por doquier, calles que sujetaban a las plantas superiores desde columnas que, comenzarían siendo de madera (aún quedan algunas), para evolucionar hasta lo que hoy podemos ver, después...
Fue tal la aceptación del recurso que, hoy por hoy, Bolonia cuenta con 62 kms de calles asoportaladas, de los que una buena parte, 42 kms, recorrerían el casco histórico. Se deduce que estamos hablando de la ciudad más porticada del mundo.
Los más son pórticos elegantes, que permiten disfrutar de la ciudad, muy a pesar de un clima doblemente adverso por la humedad.Ver más fotografías...