Un torpedo, proveniente de la Sindicatura de Comptes, ha dado de lleno en la línea de flotación del Ayuntamiento de Ibi y amenaza con mandar a pique la poca credibilidad que pudiera quedarle al actual equipo de gobierno.
Para entender lo ocurrido es necesario remontarse a primeros del año pasado, cuando la prensa aireaba las insinuaciones de Felicidad Peñalver en relación a supuestas irregularidades urbanísticas y contables en el Ayuntamiento de Ibi. Alguien recordará aquel Pleno Extraordinario en el que el PP llegó dispuesto a ser más papista que el Papa, más transparente que nadie en el mundo mundial. Hasta el punto de aprobarse por unanimidad realizar una auditoría del Ayuntamiento desde el año 2003, incluyendo la enmienda y la adición que presentó el Grupo Municipal de EUPV-Els Verds).
Aquel arrebato de generosidad se basaba en el convencimiento que tenían en el PP de que la Sindicatura de Cuentas tiene mucho más trabajo del que puede hacer y, por lo tanto, sería muy difícil que viniesen a realizar una auditoria a nuestro Ayuntamiento. Pero mira por donde, esta apuesta falló y la Sindicatura incluyó a Ibi en su Programa Anual de Actuación para 2010 y, a consecuencia de ello, se ha realizado una auditoría de las cuentas municipales del ejercicio 2008 que ha puesto patas arriba algunos departamentos de nuestro Ayuntamiento.
Ahora mismo disponemos del primer borrador de Informe que la Sindicatura ha remitido al Ayuntamiento con un plazo para realizar alegaciones que finaliza mañana. Es muy probable que el Informe definitivo difiera muy poco del borrador que se ha remitido y que constituye, como decía, un auténtico bombazo, ya que pone de manifiesto tal cantidad de irregularidades en la gestión pública que podríamos decir que cualquier parecido con lo que ésta debería ser es pura coincidencia.
El borrador del Informe de la Sindicatura contiene infinidad de observaciones sobre temas que los grupos de la oposición llevamos años denunciando: manipulación de la Cuenta General aprobada en Pleno (la que recibió la Sindicatura sufrió importantes "mutilaciones"); sobrecostes de la piscina, del Palacio de Justicia o del Teatro Río; incumplimiento de la Ley de Contratos (lease contratación a dedo) en el convenio urbanístico de Giravela, en la contratación de Tele Ibi y otros casos similares; nuevos e interesantes detalles en relación al asunto de Santa Lucía, etc, etc.
Desde luego, voy a esperar a disponer del Informe definitivo, que me comprometo a colgar inmediatamente para que esté a disposición de todo el que lo quiera leer, pero ya os anticipo que constituirá el mayor varapalo que se haya podido llevar el equipo de Maite Parra desde que está gobernando el municipio.
En la Comisión Extraordinaria de Hacienda que, a petición de los grupos de la oposición, se celebró ayer por la mañana, pretendimos hacer un análisis de este Informe, pero chocamos con la cerrazón informativa habitual. Como portavoz del Grupo EUPV-Els Verds, he propuesto la creación de una Comisión Especial que haga un seguimiento de la aplicación práctica de las numerosas recomendaciones que contiene este Informe, así como la depuración de responsabilidades por los gravísimos hechos que ha detectado la Sindicatura, pero el rodillo del PP ha impedido que se llegase a votar mi propuesta, así que hoy mismo la voy a presentar por escrito.