Siempre hay fuegos y los habrá...
La primera vez vas y te quemas
Vas y lo apagas
Vas y miras su origen
Vas y tratas de retirar combustible
Vas e identificas a los que están echando combustible
Vas...
Y cuando dejas de tener ganas de ir es mejor marcharse.
Los fuegos son inevitables en los entornos organizacionales; el problema es bajar los brazos frente a ellos.