Si no fuera porque las fechas son muy distantes, a buen seguro pensaría que estamos en el día de los Santos Inocentes del mes de Diciembre...Leo con suma sorpresa lo siguiente en PRNoticias: "21 bomberos de Madrid que están activos en la actualidad dejarán aparcadas sus funciones en el cuerpo para ejercer de ‘periodistas’.
Lo harán grabando los siniestros que se produzcan dentro de la capital y
ejerciendo de informadores de los mismos de cara a los medios de
Comunicación".
Y no es una broma. El Ayuntamiento de Manuela Carmena ha salido al paso diciendo que es una decisión del anterior gobierno municipal. Bien está que digan "heredado", pero que se mantenga el disparate ya es de traca. Según informa el diario digital, "estos 21 bomberos seleccionados se encuentran en la actualidad formándose en la academia sobre Periodismo y Redes Sociales para poder ejercer su nueva función, ya que ninguno de ellos, hasta ahora, contaba con experiencia ni formación periodística".
No es de recibo continuar una farsa que lo único que hace es desprestigar nuestra profesion. Señores del ayuntamiento madrileño: un poco de seriedad. Respetando la loable actividad de los bomberos, ellos deben estar en su sitio y en el de la comunicación institucional quienes saben ejercerla, los periodistas. Las herencias son cosas que tienen dos vías o se continua con el hecho en sí, o se deja a un lado. El equipo de Carmena debía haber acordado no continuar con una acción a todas luces injusta, y prestar más atención a un "vehículo" tan importante como es la comunicación con los ciudadanos. Dice el refran que "zapatero, a tus zapatos" y qué santa verdad es...