Hacía mucho, muchísimo tiempo que quería probar esta receta. Había visto la idea en Pinterest, Instagram, y tengo alguna que otra captura de pantalla en el móvil junto con todas las recetas que voy viendo y quiero probar. El único problema que le veía es que no sabía si hacerla para desayunar o para comer ya que hay que cocer el boniato y esto tarda un poco. Aunque el boniato se puede cocer por la noche y dejar guardado en la nevera, yo prefería comerlo calentito y justo salido del horno así que me esperé a tener tiempo un fin de semana para hacerla. Y este ha sido el fin de semana.
Ahora no puedo hacer mantequilla de cacahuete en casa porque no tengo una batidora adecuada pero en Barcelona solía hacerla a menudo. Podéis encontrar la receta de la mantequilla de cacahuete en el blog aunque simplemente se trata de triturar cacahuetes naturales con mucha paciencia.
Si como yo ahora mismo no podéis hacer mantequilla de cacahuete en casa, os recomiendo que miréis bien las etiquetas antes de comprarla ya que muchas mantequillas de cacahuete llevan azúcar y grasas añadidas. La mantequilla ideal es la que lleva sólo cacahuetes al 100% o si lo preferís podéis sustituirla por mantequilla de anacardos, almendras o cualquier otro fruto seco.
Los cacahuetes son una buena fuente de proteínas vegetales y grasas insaturadas por lo que son geniales para acompañar cualquier desayuno o merienda. El boniato es rico en hidratos de carbono, fibra y betacarotenos por lo que es genial para la piel y la vista. Además está buenísimo y se puede comer a cualquier hora del día.
Espero que os guste la receta 🙂
Ingredientes:
Instrucciones:
Pre calentamos el horno. Hacemos pequeños cortes alrededor de todo el boniato con un cuchillo pero sin llegar a partirlo en trozos o por la mitad. Horneamos durante 50-60 minutos o hasta que esté blando por todos lados.
Por otro lado, mezclamos las dos cucharaditas de mantequilla de cacahuete con un poco de leche vegetal hasta conseguir la textura que más nos guste.
Cortamos el boniato por la mitad y añadimos la mantequilla de cacahuete por encima.
¡Listo!