Bueno, pues una promoción que igual parece muy manida pero, si lo pensamos bien, en realidad es mogollón de sencilla pero nadie la hace.
Por eso mismo mola que Bono y The Edge de U2, esto es, la banda de rock más grande del mundo, se hayan plantado en el metro de Berlín para tocar un rato en acústico.
Como músicos callejeros, vale, no es original porque ellos mismos ya lo hicieron el sábado pasado en las calles de Nueva York. Y porque otros lo han hecho también, joder claro, no inventaron la pólvora.
Pero aún así, a mi personalmente me parece estupendo que bajen al underground (con su equipo, que se les ve) para tocar una nueva y un par de viejas. Canciones, se entiende
Ante la mirada ocasional pero ilusionada de unas decenas de personas, tocan primero Bono y The Edge la nueva Get out of your own way. Y les queda bien porque se han sabido montar un clásico sobre una estructura clásica.
Luego van a por Sunday bloody sunday, que Bono presenta como del nuevo disco. La cosa va creciendo y para cuando arranca One ya, sin excesos, la movida es bien chula.
Esto es, básicamente, el mayor grupo del mundo promocionando su decimocuarto disco cara a cara con la gente. Y rescatando dos clasicazos. Como en Eugenia de Montija, pero en Berlín. Como si eso molara más, ni de coña. Esto es U2 en tu puta cara.
¿Quién hace esto? Memorable el momento de Bono cantando al vagón que se abre inesperadamente y los dos fulanos de dentro ni se mueven porque ni lo esperan ni lo desean. U2 es para las masas pero no es para todos. U2 es para nosotros. De Eugenia de Montijo no salen sin tomarse mil pintas.