Boo Boo ven destruye mi infancia
Si pues, no me gusto Garfield, odié a Pasmarote, no soporté ni un minuto de Alvin y las Ardillas y por supuesto no estaré para la función de estreno de Yogui 3D o los Pitufos.
El Oso Yogui se estrena el 17 de diciembre lejos muy lejos de su Jellystone natal, que era la compañía de animación Hanna-Barbera pues ahora está licenciada por la WB. A nivel técnico me encanta como se ven los personajes trasladados al 3d, pero dudo que la película llegue a alcanzar la brillantez original del 2d el formato cómplice del capitulo de media hora para la TV, de Gags repetitivos que eran esperados y celebrados, por lo mismo que eran previsibles y creaban gratificación al espectador, como los intento fallidos por robar tartas al guarda parques en su cabaña. También de su calidad sintética, limpia y plástica que evita los detalles para ir al Gag visual directo , donde pies múltiples, nubecitas que quedan y efectos sonoros eran un todo comprensible duro de trasladar a un formato de largo aliento. Digo dudo pues ante intentos anteriores estos híbridos entre seres animados del cartoon y actores reales siempre van a pie forzado, donde uno inevitablemente siempre evaluara la dispar gestualidad entre actores reales contra la de actores animados o las proezas físicas y antifísicas que son perfectamente aceptadas por mas disparatadas dentro del cartoon se ven falsas o tristes frente a lo que haga un actor.
Temo,además, que buscar una categoría de Apto para todos llega acojudar al mejor guionista de Hollywood a pesar que sus originales del cartoon como este truhan, vago y tragón solían tener mas picardía en sus originales que en sus versiones llevadas a la gran pantalla. Pero el peor defecto que tiene una película animada no es ser un remake de un personaje del cartoon sino los intrusos, sobran los actores reales, acartonan al cartoon, lo desmotivan y lo obligan a estarse quieto que es un contrasentido tratándose precisamente de animación..