Revista Expatriados

Boringology

Por Vitta

El monigote que cuelga de un cable de South Bank1. f- Disciplina o ciencia que estudia los proyectos más absurdos que, paradójicamente, cambian el mundo.
Por ejemplo, medir el tamaño de los "güevillos" de un oso polar con el fin de calcular los efectos del calentamiento global, así como estudiar el efecto del pipí humano en los pepinillos en conserva -siento comunicaros que con el fin de fertilizar las cosechas, ¡a ver quién se come pepinillos ahora!-, o clasificar uñas de los dedos gordos del pié para prevenir infartos. Siiii, lo sé... ya me imaginaba que te habrías quedado con la duda: a los osos polares no les pasa como al género masculino del especimen humano, sino que cuanta más calor hace, más se les encogen; así que, si por algún remoto capricho del destino te ves amenzado por un Oso Polar, no te preocupes, que no tiene "güevos" a atacar...
2. f- También podemos comprender como Boringology, lo que hago la mayoría de los días yo en Australia. Porque cuando uno llega al país, no llega a Australia. Se le sienta como en una pequeña salita de espera del dentista, leyendo revistas hasta que le toca su turno. Osea, hasta que llega tu visado, la respuesta de la Universidad, las clases de Inglés, un trabajo etc... Y en esta sala de espera, los minutos se convierten en horas, y luego, fascinantemente han pasado 3 meses de preguntas constantes. En mi caso, al entrar en este estado de Boringology, me da por la vena físico-química, cortesía de mi código genético por parte de padre, y creedme querid@s, eso es muuu peligroso. Te lo dice la hija de un científico loco, cuyo padre experimentaba con sus inocentes y tiernas mascotas y usaba probetas como jarrones. El peligro asoma cuando de repente empiezan a asaltarme las dudas científicas más absurdas, dignas candidatas para la tesis doctoral de un verdadero Nerd:
-¿los hombres y las mujeres bostezamos la misma cantidad de veces cuando nos subimos al Citycat? (Catamarán con el que cruzar el río de Brisbane para ir a cualquier lado, insisto QUALQUIER LADO, porque si algo tiene la ciudad es RÍO)
-¿si los Koalas se pasan el día comiendo a eucalipto, sus cacas saben a pastillas Ricola?
-¿si los kanguros australianos boxean, los boxeadores australianos podrían sacar adelante un plan de negocio con viabilidad dedicado a prestar servicios de kanguro?
-%&?!aaa&?!
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Vale, no cabía duda alguna; se me estaba recalentado el disco duro por momentos y necesitaba tomar cartas en el asunto. Necesitaba ocupar mis horas en algo saludable y refrescante:
-¿Pero un curso de cata de vinos australianos, Huesito?-. Preguntó el santo de mi novio.
-Sí, cariño, ¿no lo ves? Es un plan perfecto, si ya lo dijo Astistófanes en el s.V a.C. Nada es tan acertado como vivir bajo los efectos de un buen vino australiano". Bueno, quizá no decía exactamente australiano...
- Hombre, visto así... ¿Pero desde cuando te interesa el vino? Si siempre nos lo mezclamos con Casera...¿seguro que no vas allí porque dan alcohol gratis? Mira que tú te bebes hasta el agua de los floreros..."
-Eso solo pasó una vez y fue un accidente... Además, ¿sabías que un consumidor tarda una media de 38 segundos en elegir la botella de vino que va a comprar? Lo que significa que si voy al curso, podemos ahorrar en la licorería -la única manera para comprar alcohol en Australia- hasta 30 segundos por botella, lo que a la semana son 3 minutos, 30 segundos, que se traduce en términos de nuestra vida a ...

-Está bien, está bien....Huesito, tranquila. Vé al curso...
Ya me veía con la copita de vino australiano en la mano, de relax, llegando hasta el fondo y sin dejar ni una gota de conocimiento sobre los productos autóctonos de mi nuevo país de acogida. Y teniendo en cuenta lo que todo el mundo sabe, de que el "Alcohol improves our foreign languages" era un plan más bello y perfecto que un MacBook Pro...
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El curso empezó un martes a las 9 de la mañana en la Central Library del CBD. Y aunque la cosa prometía, -pues leí en el programa que el curso incluya una cata de vinos australianos de 300 años de antigüedad-, después de una semana de curso, todavía nadie se había ofrecido a brindar ni una gota de vino.
Y yo, pues ahí, en el aula, cuando intentando no prestar ninguna atención al curso -ya que estaba muy concentrada en buscar las partes mas superficiales de mi ser con el fin de borrar de mi memoria el estado de Boringology- no pude evitar oír de fondo lo que parecía ser una clase teórica sobre los orígenes del vino:
"Las referencias bíblicas son numerosas. Noel plantó un viñedo: bebió y se emborrachó, y el primer milagro de Cristo fue convertir agua en vino en el matrimonio de Cana". -¡Oh, no! Interferencias...¡maldito Inglés! De repente todos ríen, así que yo también, aunque en español: jajajaaja". Creo que ha dicho algo como que sería genial tener un padrino de bodas que convirtiera el sorberte de limón en Gin Tonics. Ojo, vuelve la conexión-
... "Cicero acusó y sentenció a Marco Antonio por vomitar en el senado debido a un exceso de alcohol. El escándalo fue tal, que llevó a Marco Antonio a redactar un panfleto "Deebrietate sua" en el que se proclamaba así mismo para ser elegido como Campeón Mundial de Borracheras..."
Nada, no era mi día de suerte. Pero leches: Noel, Cicero, Cristo y el Espiritu Santo....¡se puede saber dónde tiene esta gente escondido el puñetero vino!....
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Así que llegué a casa, colgada en mis pensamientos, más Boringology que nunca y más seca que el pelo de Tamara la mala, o... debería decir Ambar? Mi plan de beber para resetear había fracasado. Pero había aprendido un importante lección: ¿Porqué resultará tan difícil ser superficial en esta vida?

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