Boyfriend

Jersey/Jumper: Pull & BearBarra de labios/Lipstick: Dior
Si vestirse de Zara Kids es una gozada, como apuntaba en posts anteriores, hacerlo con ropa de chico es el nivel supremo de la comodidad y, en ocasiones, también del romanticismo. Os aconsejo encarecidamente que os suméis a la moda boyfriend, pero no esa que adapta los modelos masculinos a las estanterías de las féminas, no, sino al boyfriend real: a la de quitarle a vuestra pareja un par de jerseys extra largos, alguna camiseta holgada o, incluso, las más atrevidas, un par de tejanos que podáis ajustaros fácilmente a la cadera. Y si no tenéis pareja tampoco tenéis un problema para subiros al carro de esta tendencia; yo misma me compré hace unos días este precioso suéter en la sección masculina de Pull & Bear. Porque a veces ellos pueden ayudarnos a sentirnos más sexys, más bonitas y más cómodas en nuestra propia piel. Y si no me creéis, probad vosotras mismas el (seductor) efecto de la moda boyfriend. Eso sí, que nuestra esencia siga presente en unos labios carmesí o en un par de tacones que nos recuerden el camino de vuelta.
If getting dressed in Zara Kids is pure joy, as I pointed out in previous posts, getting dressed in male clothes is the supreme level of comfort and even romanticism at times. I strongly recommend that you join the boyfriend trend, but I don’t mean the one that adapts masculine outfits to female shelves but the real boyfriend style. So borrow a couple of extra long sweaters from your partner, a loose T-shirt or even a pair of jeans that you can easily adjust to your hips, if you are daring enough! And don’t worry if you don't have a partner but want to jump on the bandwagon of this trend; a few days ago I bought this beautiful sweater in the male section of Pull & Bear myself. Because sometimes guys can help us feel sexier, more beautiful and more comfortable in our own skin. And if you don't believe my words just try the (seductive) boyfriend effect. But wait! Our female essence must still be present in our crimson lips or in a pair of heels that remind us the way back to pure femininity.